Acaba de
empezar el especial de Al Rojo Vivo en la Sexta y el lumbreras Ferreras lo
primero que dice que es al final se va a saber, a tiempo real, quién es el que
va a ganar el debate. Esto vuelve a ser nauseabundo, es imposible, no dan más
de sí, este es el periodismo pobre que nos trata de informar, evidentemente,
sin conseguirlo. No se le ha ocurrido decir, por ejemplo: Al final, podremos
conocer si algún político nos sorprende con alguna idea fascinante, genial y
genuina para salir del agujero social, político y económico en el que nos
encontramos atrapados. En lugar de ello… ¡hala, a la competición!, y si hay
mucha confrontación, insultos, o se meten mano… ¡mejor!, es lo que pensarán
porque las imágenes darán la vuelta al mundo, como hemos visto en algunas
ocasiones, parlamentos del extranjero donde los políticos se dan de lo lindo:
puñetazos, zapatazos, objetos de todo tipo y formas que vuelan en todas
direcciones.
De nuevo, otro
lumbreras mostrando nivel le pregunta a Pablo Iglesias: “Sr. Iglesias, ¿el
objeto del debate es Pedro Sánchez?”. Quieren sangre y mucha mierda, estos
periodistas no valen más que para rellenar espacio y tiempo… tampoco se le ha
ocurrido preguntar por algo sobre lo que haría si llegara a gobernar o ser
socio de alguien que gobierne. Es como si España estuviera organizando una
fiesta nacional… ya habrán corrido por ahí para que les contraten mucha
publicidad y a tarifas desorbitadas aprovechando el circo televisivo que
organizan estos monigotes. Siguen abundando en el ataque de todos contra
Sánchez, mezclado con la posibilidad de que Rivera lleve alzador en sus zapatos…
¡fíjense, la pobreza mental de los periodistas que pretenden ofrecer un debate
fundamental para el futuro de este país! Se puede caer aún más bajo, supongamos
que comienzan a hablar de los niños de Pablo Iglesias, del caballo de Abascal,
del romance de Rivera con Malú, o vaya usted a saber de qué son capaces con tal
de entretener a la audiencia al tiempo que emiten anuncios millonarios, que es
para lo que viven… decir cuatro perogrulladas, tener a la gente horas atontadas
con la caja boba y llevarse salarios galácticos.
La situación
es muy delicada, estamos a la puerta de un nuevo derrumbe económico-financiero mundial
según vengo oyendo a ciertos críticos y analistas serios. Tenemos la deuda
pública por los cielos, es de tal magnitud que no tenemos recursos para hacerle
frente. La hucha de las pensiones no se recupera… ¡es imposible!, no mejoran
las condiciones laborales, se maquillan las cifras del desempleo con los
contratados en los periodos estacionales, en las campañas de tal o cual signo, o en esos
acuerdos de las administraciones con algunas empresas, que para que coloquen a
gente de su zona, regalan terrenos, ponen dinero de todos para hacer disminuir
el número de desempleados en momentos en los que van a salir las cifras de las
encuestas de población activa. Sabiendo que la situación es tan crítica, por qué
no intentan preguntar por las soluciones, por los planes, por las estrategias
para arreglar problemas de la gente. En lugar de esto, animan a que no hablen
de nada de propuestas, intentando que entren los candidatos un poco caliente y
deseosos de tirarse al cuello del vecino de atril.
Siguen
hablando del alzado que ahora no es en los zapatos sino en forma de tarima de
diez centímetros para elevar a Rivera, y de ahí vuelven a remover la cochambre
porque muestran estar deseosos de que el debate sea una pelea de todos contra
Sánchez. ¿Qué les han enseñado a todos estos explotadores de la imagen de los
demás y de la suya propia, en las Universidades?, ¿no son capaces de extraer
información interesante de los candidatos?, ¿ya no hay nada más? De pronto
irrumpe la voz de un periodista joven que grita desde algún rincón: ¿Casado, vamos
a ver al Casado duro, o al Casado moderado? De nuevo, es fácil comprobar que este
gremio mediocre necesita un ring de boxeo o lucha libre, en definitiva quieren
golpes, pelea, insultos, morbo, porque dicen que el morbo vende. Así que esto
es según ellos lo que debe ser más importante en este país.
Se vuelven a
callar los periodistas, y para que no decaiga el corral de gallos, espeta
Ferreras una vez más: “Angélica, ¿va a ser este un debate de todos contra Pedro
Sánchez?... están locos por que sea un combate duro aunque de lo mollar no se
hable. Una y otra vez apuntan hacia lo que están deseando ocurra, sangre,
quieren sangre, ¡qué lástima de cantidades de dinero tan generosas y tan mal
empleadas!
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