No todo es
política ni mucho menos, en los últimos años nos han metido en el saco de la
política, y ahora, además de hacer con nosotros lo que quieren, llevarse cuanto
han tenido a bien, exprimiendo los dineros públicos y acordando fuera de cámara
cuanto han querido, a favor o en contra de la ciudadanía, por lo general para
proporcionar beneficios a sus partidos y a los poderosos que les han permitido
llegar, han inundado los medios, mejor dicho, los han acaparado, se han metido
en nuestros hogares hasta llegar a hastiarnos.
Ninguno de esos
va a ir a su casa a ayudarle a llegar a fin de mes. Ninguno irá a su hogar a
socorrerle ante un imprevisto. A ninguno se le ha visto coger una pala o un
cepillo para sacar barro de las casas que se han anegado estos meses pasados.
La política como la entienden los que no dan el nivel humano suficiente, no
merece la pena vivirla, primero se ha de alcanzar el punto de empatía y amor
por los demás, después se puede y se debe actuar para el bien de todos. El todo
de los políticos es un grupo muy selecto donde solo tienen cabida los que
piensan como ellos, son dictadores en potencia, observen que una vez y otra nos
llevan a elecciones con el deseo de alcanzar una mayoría, a ser posible
absoluta, para ser el ordeno y mando de la sociedad española. Esto lo dicen
todos, hasta los que se llaman de izquierda muy a la izquierda, a ellos también
se lo he oído.
La vida se
está dando en cada instante, la vida siempre es y la mayoría se la están
perdiendo entre distracciones… la política como se vive hoy en día es otra más.
El ser humano tiene que ser humano ante todo, algo que todavía no ha aprendido,
el policía carga contra sus semejantes, y los semejantes apedrean policías,
¿qué han aprendido tanto unos como otros? El marido o la pareja asesina a la
persona con la que estaba compartiendo la vida, con la que tenía hijos. A
veces, la salvajada se lleva al límite de la barbarie, se mata delante de los
hijos… se mata, también, a los hijos, ¿dónde quedó lo humano?, ¿qué hemos aprendido,
qué nos enseñaron, quiénes somos? Esto es preocupante, mucho más que el empate
del Real Madrid, las manifestaciones por la independencia, con quién le está
poniendo los cuernos tal o cual personaje famoso o las próximas elecciones.
España siempre irá bien si dejan de robarnos, porque los españoles aportamos
para pagar los servicios públicos, para eso hay unos presupuestos que se
aprueban y unos recibos que llegan a nuestras cuentas bancarias o a nuestros
hogares para que aportemos lo que nos toca. Mientras a la gente le importe una
mierda lo que le suceda a otras personas ajenas a su propia familia, el país,
el Planeta, la humanidad, se irán a la porra; esa es la antesala de la
corrupción, de la estafa, de las falsas crisis, del saqueo continuado, del
enriquecimiento vertiginoso de ciertos individuos carentes de escrúpulos.
No sé en qué
momento la humanidad dará un giro, pero o lo da, o esto encalla, por no decirlo
de otra forma más desagradable. Tal vez no sepamos cómo hacerlo, quizás,
estemos tan ciegos que ya no acertamos a ver el camino, pero es necesario
educar en valores, cambiar el sistema educativo para que las nuevas
generaciones no sean programadas en la inercia del catastrofismo sin sentido,
que es la carta de navegación actual. Estoy pidiendo demasiado, ¿cómo alguien
que no sabe de qué hablo puede hablarle de ello a otros?, no es posible que un
ignorante de algo pueda prescribir materias concernientes a ese algo. Si esto
se mantiene, nunca con el material que tenemos se podrá tomar un rumbo nuevo,
solo se limitarán a retocar lo que ya hay, puesto que es lo que menos trabajo
cuesta. La mediocridad está servida desde hace algunas décadas, salvo excepciones,
claro está.
Salga al mundo
con los ojos abiertos y diga qué es lo que ve. Sea honesto y sincero consigo
mismo, permítase mirar de veras. No sé si el conglomerado de intereses le deja
ver algo, no solo me refiero a sus intereses, sino al asfixiante egoísmo
disuelto en el aire que respiramos. Dicen que somos el ser más inteligente del
Planeta, pero parece que hemos destinado la inteligencia solo a la generación
de beneficios para unos pocos. Si la industria se automatiza nos preocupamos, no
somos capaces de darnos cuenta que las máquinas pueden trabajar para todos
nosotros, es entonces cuando se pone la inteligencia al servicio de la
humanidad.
Antes del 10 N
la vida fluía, después de esa fecha seguirá fluyendo, lo que nos debemos
preguntar es si nosotros fluiremos también con ella. Cómo echarle cuenta a esa
partida de gente anquilosada, todavía no es posible quedarse en casa,
conectarse con una web del Estado español y votar a través de una tablet, de un
móvil o de un PC… ¡no!, hace falta gastarse no sé cuántos millones en los
preparativos, en la publicidad y en el reparto de prebendas a los partidos
políticos… ¿hasta cuándo seguirán engañándonos? Estos no son políticos de este
siglo sino más bien del pasado.