Tras haber realizado la ruta anterior, Antonio y yo nos quedamos con la sensación de que no habíamos trazado exactamente lo que habíamos pretendido. Estuvimos comentando y llegamos a la conclusión que tal vez, una vez llegamos a Constantina no tomamos la carretera que Google maps reseña como la de las 365 curvas. Antonio me comentaba que recordaba haber visto una señalización un tanto oxidada, medio borrada, hacia Las Navas de la Concepción sin tener que pasar por La Puebla de los Infantes. Es por ello, que Antonio propuso volver a ir a Constantina y cerciorarnos de tomar la desviación correcta, pues él seguía intuyendo que había dos formas de llegar a Las Navas de la Concepción, y que la vez anterior no hicimos lo que pretendíamos. Hay que decir, que a pesar de que eso pudiera ser cierto, ir a Las Navas de la Concepción a través de La Puebla de los Infantes desde Constantina, y según Antonio, tiene alrededor de cuatrocientas curvas, que en nada envidia al otro tramo, pero como siempre se habla del otro, nosotros estábamos dispuestos a cabalgarlo.
Una vez más, tras los preparativos necesarios: revisión de presión de neumáticos, nivel de aceite, refrigerante, preparar un refrigerio para el camino, etc., salimos por A4 dirección a Carmona, tomando posteriormente el desvío hacia Lora del Río, buscando las indicaciones hacia Constantina. Una vez situados en esa población encontramos, efectivamente, en sendas calles diferentes, dos indicaciones: Las Navas de la Concepción, La Puebla de los Infantes, y por otro lado: Las Navas de la Concepción. Evidentemente tomamos esta última que no pasaba por La Puebla de los Infantes, que fue el error que cometimos la semana anterior. Algo más de veinticuatro kilómetros de auténtica curva, de auténtico vértigo, una danza incansable, inacabable, rítmica, armoniosa, me quedo sin calificativos para describir la cadencia de aquel vals sobre ruedas. Es una sensación indescriptible, hay que vivirla, te ha de gustar mucho las motos para percibirla. Rodeado de praderas y montes verdes, de expectantes árboles que te acompañan durante toda la travesía serpenteante. Ha hecho mucho frío, mucho más frío que la semana anterior, y de nuevo alcanzamos aquella tranquila y silenciosa plaza de Las Navas de la Concepción, donde la vez anterior también nos detuvimos a comer algo. Sorprendí a mi amigo Antonio, pues en esta ocasión, llevaba un termo con alubias y verduras calentitas, que serví en plato y comí con cuchara, solo nos hizo falta la mesa del comedor... ¡Un show en medio de la calle! Antes mi fruta, como tengo costumbre de hacer: una mandarina, una naranja, no sé de qué tipo, de esas más gruesas, y un caqui persimón. Antonio trajo sus emparedados de costumbre, su zumo de pomelo y de postre, un polvorón.
Una vez reposado un rato, nos pusimos los cascos, nuestras chaquetas moteras, guantes y nos decidimos a continuar la ruta. En esta ocasión, y como le gusta a Antonio había previsto la vuelta por otras carreteras. En primer lugar, subimos hacia San Nicolás del Puerto, donde se encuentran las cascadas del Huéznar, teniendo el gran placer de conducir varios kilómetros paralelamente a escorrentías de aguas cristalinas que serpenteaban entre ramas y árboles. Posteriormente buscamos la carretera que nos llevara de vuelta por: Cazalla de la Sierra, El Pedroso, Cantillana, Villaverde del Río, Brenes, y a través de A4 llegar a casa. Después del gozo del día motero, no hay nada mejor que unas curvas más, algo menos reviradas y por una carretera algo más ancha, que es la que une Brenes con la A4, dirigiéndote primero como si fueras para Carmona, tomando la desviación a la altura de la Urbanización Prado Llano, pasando por delante de las urbanizaciones El Corzo, La Celada y Camposol, desembocando en la mismísima A4 a escasos seis kilómetros de nuestra urbanización.
Un nuevo día maravilloso, revitalizante, que es lo que te aporta circular por los parajes de sierra. Un día de buena compañía, de amenas conversaciones mientras se conduce, de vistas impresionantes... ¡Un día mágico!
Seguiremos...
No hay comentarios:
Publicar un comentario