Estoy harto de
mentiras políticas, de guerras por el poder para seguir delinquiendo, de pactos
sucios para tratar de poner a salvo un sistema corrupto de privilegios para los
de siempre. Estoy harto de sentir impotencia al ver como los ciudadanos somos ninguneados
por políticos que no nos representan y porque mi sentido común me hace no
digerir tantas barbaridades cometidas en nombre de la aparente democracia, la
constitución amañada, la justicia secuestrada y la más absoluta impunidad con
la que escapan los delincuentes de guante blanco de este país.
Es asqueroso y
hasta nauseabundo el proceder de una gran mayoría de nuestros políticos, sobre
todo los del partido que gobierna y de todos aquellos que se les arriman para
sacar tajada de la relación. Hay tal locura en la Administración de nuestro
país, que hasta se atreven a inculpar a los arquitectos de que el partido del
PP hubiera pagado la reforma de su sede con dinero negro. Los arquitectos, en
todo caso, son igual de infractores o delincuentes, como queramos llamarles
pues se lo merecen, como el partido del gobierno. Para que alguien cobre en
negro tiene que haber alguien que pague con dinero negro, pero que lo haga el
partido del gobierno con Rajoy a la cabeza, significa, ni más ni menos, que los
delincuentes nos están gobernando, que no dimiten a pesar de estar engañando al
fisco, de haber incumplido su programa electoral y sin embargo se erigen en
grandes españoles y patriotas, de qué, de paraísos fiscales, dineros en Suiza y
cosas así supongo.
Las encuestas
del CIS deben mentir cuando dicen que serán la fuerza política más votada, es
imposible o es que la gente de este país ha perdido los valores, la moral y la
ética. No son solo casta, son caspa, son delincuentes, esto se ha de comprender
tras la ristra de casos de corrupción en los que están envueltos los políticos
del PP. El voto solo se puede entender en el caso de los cargos políticos y sus
familiares directos por aquello de estar mirando por la olla, pero es inverosímil
y, por supuesto, falto de razón alguna seguir siendo un autómata que vota
porque siempre lo hizo a esta formación tan informal. También puede suceder que
amañen los resultados de las encuestas para tratar de influir en los votantes y
no presentar al partido del “ingobierno” como el barco que lleva tres años
haciendo agua, porque ya se sabe lo que va a ocurrir, pues que se va a hundir.
Rajoy, ni hay
alegría, ni se nota la recuperación, ni la crisis es historia, ni es verdad
nada de lo que usted dice salvo alguna cosa y sus políticas de la troika nos
benefician en diferido, que es lo mismo que decir que no nos benefician sino
todo lo contrario. Por favor, Rajoy, dimita, convoque elecciones por el bien de
los españoles.
No hay comentarios:
Publicar un comentario