El PSOE está
revuelto y su dirigente da un golpe de efecto para hacerse con más cuota de
poder dentro de la formación. En una medida antidemocrática pone en la calle a
Tomás Gómez, candidato a la presidencia de la Comunidad de Madrid, elegido en
primarias.
Cuando se da
cuenta de lo que ha hecho argumenta que con Tomás Gómez la Comunidad de Madrid
perdía intención de votos, que había un deterioro progresivo. Cómo no lo habían
visto hace un mes cuando Pedro Sánchez hablaba de tener el mejor candidato y
otras muchas adulaciones, que ahora debemos entender eran falsas cuando las
decía. Nada ha cambiado desde entonces hasta ahora, salvo que ahora el partido
del PSOE es un poco menos democrático.
En las
tertulias se presenta este partido como la única salvación de izquierda para
hacer posible el cambio en este país. Ahora hablan de ir a por el empleo de
calidad cuando el haber incorporado las reformas laborales en el mandato de
Zapatero, seguidas por Rajoy, nos han traído hasta el pésimo momento para el
derecho de los trabajadores, que hoy padecemos. El PSOE introdujo los mandatos
de la Troika, ya en 2010 se vendió, mejor dicho nos vendió a los deseos e
imposiciones de aquella y de Merkel. Fue el PSOE el que pactó junto con el PP
aquella modificación de la Constitución, Art. 135, por el que daban prioridad
absoluta al pago de la deuda frente a cualquier necesidad social: sanidad,
educación, etc. Son estos partidos los que han demostrado que les importa más
estar a bien con los poderes monetarios que con los ciudadanos.
Vienen las
elecciones y no te vayas a dejar engañar, se maquillan y tratan de acercarse a
los ciudadanos en un bien pensado movimiento que les de votos para seguir
haciendo las políticas impuestas por los mercados, por los poderosos del
dinero, los banqueros y porque se niegan a dejar el gran negocio corrupto en el
que han convertido a la política. No te dejes engañar por los que han gobernado
y hemos visto lo que han hecho: Cierres de empresas, cientos de casos de
corrupción, más y más gente desempleada, familias sin ingresos, familias
desahuciadas por las mismas entidades bancarias a las que hemos rescatados con
nuestros dineros, acumulando más y más millones de deudas hasta llegar, de
momento, al 100 % del PIB. La energía no deja de subir y además el “ingobierno”
no deja de dar dinero nuestro a las eléctricas, a las empresas privadas que
gestionan las autopistas, a los que fallan en la busqueda de gas o petróleo, a los
bancos, etc. PP y PSOE se han creído que España es su cortijo personal y que
pueden hacer con lo que es de todo, lo que a ellos les venga en ganas.
Espero que en
todas las próximas elecciones vayamos a las urnas sin el miedo que esos mismos
partidos nos han querido inculcar y los pongamos a la cola del furgón, donde
deben estar después de todo lo que han hecho últimamente.
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