Intima un poco con una persona, y
aunque tuvieras una impresión no demasiado favorable, pronto verás su belleza interior.
Si esa persona decide abrirse, confiar, mostrarse, y tú te entregas también, es
imposible no recibir la luz de la transparencia porque se da lo que se tiene,
se ofrece al otro lo que se es, y no hay vueltas ni revueltas.
No hay nada más hermoso que
aproximarse a llegar a ser uno con el otro, y en esos momentos se está más
cerca. La belleza interior se desborda, sus ojos brillan más, la sonrisa es
continua, y la belleza externa se sublima, convirtiéndose en hermosa criatura.
Es la vida que fluye cuando te sitúas
en el corazón, siendo compartida en un momento intenso de relación. No hay nada
más, no piensen mal, es solo la pasión de vivir, de estar vivo y presente, más
vivo y más presente que nunca.
La gente es buena, la gente es
bella, la gente es amor, aunque por el momento solo crean que aman a sus
maridos, a sus mujeres, a sus hijos y a sus familiares. Todos tenemos las
grandes capacidades para ser más humanos, en muchos instantes lo somos para
gozo de los demás y de uno mismo si se es consciente de ello. ¡Somos tanto, y
nos vivimos tan poco!, que casi cualquier migaja es un gran regalo para
nosotros. Seamos más, queramos ser más y mejores cada día, tenemos lo necesario
para que esto suceda, es solo cuestión de poner un poco de nuestra parte, es
necesario poner un poco de orden en nuestros convencimientos, es posible que
descubramos que muchos de ellos no nos hagan falta, o sencillamente caemos en
la cuenta de que eran falsos.
Como dice mi amiga Patri, nadie
se como a nadie, ni que ella sepa, nadie cabe en la boca de nadie, por esto
desterremos el miedo, lo cual no se debe confundir con tener que arremeter
contra todos, ni tener derecho para molestar o someter. Se trata de todo lo
contrario, aprender que es la ausencia de miedo la que nos debe posibilitar
nuestra apertura, nuestra comprensión, nuestra generosidad, y nuestra
compasión. Somos seres amorosos que hemos levantado corazas para protegernos de
enemigos imaginarios, y esas mismas corazas nos impiden contemplarnos como
realmente somos, es un filtro denso que no permite que la energía y la luz
circulen con libertad.
Nadie debe desesperar, digo como
Obama: We can, podemos, que es su traducción al español. Todos tenemos todo lo
necesario, aunque no nos lo creamos, para ser mejores cada día, esto te lo
aseguro, pero al menos propóntelo. Es como aquel dicho que viene a decir de uno
que pedía constantemente que le tocase la lotería, y tan pesado se puso, que le
recomendaron que al menos comprara el décimo. Sin comprar lotería no toca, y
sin tener la intención o voluntad de ser mejor cada día, pero por
convencimiento y toma de conciencia, no por el solo hecho de convertirse en un
tonto bonachón. No se trata de eso, ser mejor persona, crecer como ser humano,
tratar de vivir rectamente, en cuanto a ser honesto, respetuoso, tolerante, más
humano, más civilizado y llegar a amar a la humanidad y a los demás seres
vivos. Ese si que es un gran paso para la humanidad.
Lo mismo se dijo cuando se llegó
a la Luna, pero sin embargo ningunas de las ruinas o miserias del colectivo de
los hombres alocados o inconscientes se enmendó. Las guerras han continuado,
las amenazas siguen, las bombas caen, los hombres matan a sus semejantes, y una
gran parte de la población vive en el umbral de la pobreza, por lo que el gran
paso para la humanidad sigue siendo una tarea pendiente.
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