Todos los partidos de la Cámara
han acordado subir el SMI a 800 euros de aquí a final del 2018 y a 950 euros a
final del 2020. De seguida se reúnen: Gobierno, el representante de la patronal
y el representante sindical, suena la música y comienzan a hacer parejas. Una
vez finaliza el baile vienen los cambios de cifras y de fechas, y me pregunto:
¿por qué se atreven a matizar lo que el Congreso ha decidido por mayoría?, ¿por
qué se tienen que reunir?, ¿quiénes son para enmendar la plana a la ciudadanía
que habla a través de sus representantes en el Parlamento? A mi, personalmente,
me parece que hay que aplicar la subida de inmediato. Los decretazos que hemos
soportado cada viernes durante la anterior legislatura, no eran medidas para
dentro de dos o tres años, eran para ¡ya!; ¿por qué todo aquello que va a favor
de la gente o del Planeta es para aplicar dentro de unos años? El PP se opuso y
C’s se abstuvo, a ver si los votantes de dichos partidos abren los ojos de una
puta vez, y entienden algo de lo que está sucediendo en este puñetero país. A
ver si eligen mejor a los que vemos que están del lado de los trabajadores y
cuales se alinean constantemente con los intereses de los empresarios y
banqueros, ¿cuántos siglos van a tener que transcurrir para que algunos se
enteren?
El PP y C’s (la marca blanca del
PP) están para proteger a las grandes fortunas, a los empresarios, a las
multinacionales y a los banqueros, y no a los intereses de la gente popular del
pueblo. Ellos mueven ficha siempre en la dirección que no llegue a perjudicar a
esos señores del dinero. En este caso que nos ocupa, la subida del SMI,
necesaria para que nadie tenga jornada completa y gane menos de 800 euros,
salario con el cuál se vive más que ajustado, se oponen y hacen que se dilaten
los plazos para aplicarlo. Algo que es una necesidad para poder comenzar a
vivir un poco más dignamente, pero como vemos, una vez más, a la gente del PP,
de C’s y de los sindicatos, les importa un rábano. Desde mi punto de vista, se
debería de aplicar desde el mes siguiente a la toma de acuerdo en el Parlamento.
Ya sé que la medida propiciaría más desempleo y por eso se aplica tan
cautamente y prolongadamente en el tiempo, no soy falto de conocimiento, pero
toca las pelotas que siempre sucede con las medidas a favor de la gente. Cuando
el Gobierno decide subir un impuesto, es inmediato y nos jodemos todos, pero
principalmente, como siempre, los que menos tenemos y podemos. Ya ven ustedes
la que se ha liado con las empresas de energías que no se quieren comprometer a
no cortar los servicios a las personas que no tengan suficientes ingresos para
abonar la energía necesaria en la estación fría que viene, y el Gobierno no les
obliga, habiendo sido empresas privatizadas en condiciones ventajosas, teniendo
a muchos ex altos cargos de la Administración en los consejos de dichas
empresas, y siendo nuestro gran parte del tendido eléctrico, porque lo pagamos
entre todos. ¡Esto es una vergüenza de país! Es un país vendido a trozos a los
amiguetes, para mantener un concierto de recolocación para ex políticos. Sin
volver a dar la carga con las relaciones mafiosas entre Gobierno y grandes
empresas constructoras, sobreprecios,
comisiones y demás acciones corruptas entre unos y otros, a la que la justicia
hace la vista gorda. Todavía no se han fundido a ningún corruptor, a los
gerentes de esas empresas importantes de construcción, que no dejan de chupar
del dinero de todos, al tiempo que no dejamos de pagar sobreprecios por
manipulaciones oscuras que solo los intervinientes en el trato saben. ¡Es una
vergüenza!, y el PP metido en mierda hasta el cuello, o las cejas más bien,
sigue pudiendo respirar porque los jueces y fiscales de este país ya se
encargan de darles vidilla. ¡Sigan apoyando al PP, a C’s y a los sindicatos subvencionados
por el Gobierno, que nos irá de maravilla!
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