Hoy hay sesión de hacer creer a la gente que manda, que puede elegir algo, que lo que haga con su papeleta va a servir para algo, etc. Después vendrán los pactos que desvirtuarán lo que haya salido de las urnas, aunque primero se impondrá lo que la ley injusta que nadie modifica, diga, arrojando unos resultados nada justos ni igual para todos los que se presentan. Ya han pasado las promesas propias de los mítines preelectorales, esas que después casi nadie cumple, porque de lo que se trataba es de conseguir cuanto más votos mejor, que es a lo que juegan los que pretenden perpetuarse en el poder, o sea, sea como sea, o dicho de otro modo: a toda costa.
Esta noche se sabrá lo que resulte de todo ese coctel de engaño y pretensiones al margen de lo que de verdad interesa a la ciudadanía, puesto que los políticos juegan en otra liga y están a otras cosas, y con otros negocios entre manos. De los resultados dependerán los dineros que se llevarán unos partidos y otros, de manejar futuras inversiones, futuros repartos de fondos next generation, y todos esos inventos para hacer creer a la gente que estar en el club tiene ventajas y nos llegan dineros como si no se tuvieran que pagar, no se hubieran pagado por adelantado parte de ellos, o no engrosaran la deuda pública otra parte de los mismos.
La gente saldrá de sus casas, con su idea concebida de lo que va a votar, a los suyos, a los que siempre les han estado engañando, sobre todo si han gobernado alguna vez, y todo dependerá de lo que tengan previsto los que mandan, siempre es así. Los del dinero mandan, ponen y quitan gente de los gobiernos, dejan que se enriquezcan a costa de todos nosotros, se lleven los 3% y muchas otras comisiones, pero las políticas tienen que ser las que ellos ordenen y pretendan, o vas fuera del juego. Y la gente sigue pensando que ir a votar sirve para algo, los limites de lo que dejen o no hacer en favor de la gente los ponen los del dinero, y no hay más.
Lo que hay se debe apartar, dejar inservible, para caminar hacia otra forma de gestionarnos como sociedad sin la intervención de los fondos de inversión, sin el papel protagonista de ciertos banqueros, de la UE, del FMI, del BCE, sabiendo administrarse sin corrupción que es lo que lleva en vena el sistema reinante y todos los que juran o prometen defenderlo y perpetuarlo. Hay que ir a algo nuevo, distinto, llevado directamente por la ciudadanía, decidiendo entre todos todo lo que nos afecte, con honestidad y compromiso por lo público, por lo que es de todo, dando poca cabida a lo privado, solo la justa y necesaria, que en esa relación se fomenta el papel del corruptor y el del corrupto. Hay que hacer entender a la gente que lo que nos haga falta lo debemos aportar entre todos por el bien de todos, no para que se lleven un buen cacho los que intermedian, como viene ocurriendo. Debemos ser autosuficientes, reducir gastos innecesarios, intervenir precios de todos los que pretendan abusar del bienestar y el monedero de la gente. Si no miramos nosotros por lo nuestro, no va a venir ningún payaso de esos a hacerlo, porque esos ya vienen programados para perpetuar lo que el capital les tiene dicho y con los que han pactado el enriquecimiento mutuo, el de ellos, no el bienestar de la gente y el progreso del país.
Seguiremos...
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