Un año más llegamos al final de
esta forma de contar el tiempo, en periodos semanales, mensuales y anuales,
obviamente en días, horas, minutos, segundos y cuantos más sectores y nombres
se les quieran dar; el caso es que este año 2013 finaliza y entrará otro
periodo de tiempo, de igual extensión, pero totalmente diferente. Como sabemos,
cada momento tiene sus singularidades, ninguno es exactamente igual al
inmediatamente anterior y por ende tampoco será igual al posterior. La vida se
reinventa cada segundo, siempre hay factores que intervienen que provocan
situaciones semejantes, pero no exactas a las otras por mucho que algunos crean
que cada día es lo mismo, aún en la monotonía del trabajo de una oficina, cada
día es diferente, surgen asuntos distintos, apuntes contables que no tienen que
ver con los del día anterior, se manejan cantidades nuevas, el jefe plantea otras
cuestiones, se reciben llamadas telefónicas que nada tienen que ver con las que
se atendieron el día anterior ni con las que se atenderán mañana.
La vida es nueva a cada instante,
solo nuestra mente dice que es una rutina y nos lleva al desinterés, a la
apatía, a la desgana de levantarnos cuando nos suena el despertador, pero si
piensas solo un segundo y te ilusionas por todas las nuevas situaciones que vas
a vivir, te dará otra perspectiva de la monotonía en la que te crees estás desenvolviéndote.
Ese es, precisamente, el detonante de tu motivación, ¡búscale cada mañana, ilusiónate!
Tu no eres una máquina de tu
oficina, de tu empresa, puede ser que alguien quiera que lo seas o te trate
como tal, pero tu eres una persona, un ente complejo con una mente prodigiosa,
con un corazón que te ayuda a que tengas sentimientos y, una capacidad de que
ambas sean una única conciencia, a su vez una con la energía de la vida. Una
capacidad superior que tenemos todos los humanos, que nos permite hacer las
mismas cosas que hacemos pero con plena conciencia de ser uno con todo y todos,
asimismo poder fluir con la vida para hacer lo que tengamos que hacer, aquello a
lo que nuestro interior nos lleve, que no tiene que ser nada que otro haga
puesto que cada uno de nosotros somos diferentes, auténticos y genuinos.
Es por ello, que nadie puede
aconsejarnos, que nadie puede hacer realmente nada por nosotros, de igual modo,
lo que le vale a otros no tiene, forzosamente que servirnos a nosotros, solo
nuestro interior contiene todo lo que nos puede realizar como seres humanos, es
cuestión de reflexión interior, de preguntarnos, de tener paciencia y esperar
respuestas, permanecer con actitud de atención, debemos sentarnos en silencio,
andar en silencio, pasar más tiempo con nosotros tratando de establecer
contacto con nuestro ser más interno, tratar de mirar hacia dentro, tratar de
sentir, oír y comprender. Para mí y para muchos “sabios”, no quiero decir con
ello que yo lo sea, ese es el camino para profundizar, conocerse y crecer
interiormente. Si supierais cuan necesario es actualizar el potencial que
tenemos, cuando digo actualizar me refiero a hacerse consciente de él, vivir
desde él, llegar a ser él, para mi es situarse en la energía inteligente de
vida, para fluir confundido con ella, solo siendo vida, lo más puro que podemos
llegar a ser.
Como estamos llegando al final
del año solo puedo desearte que te sigas a ti el próximo año, que crezcas
interiormente porque nada ni nadie te va a hacer sentir más pleno y feliz en tu
vida, solo después de conocerte un poco vas a comprender cuan pobre es la
sociedad y sus normas tal cual han establecido; estas que tratan de obligar a
vivir en el exterior y dando importancia a lo que no la tiene realmente. ¡QUE
SEAS MUY FELIZ!
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