Sigo maravillándome del vuelo de
los aviones, a pesar de mis cincuenta y ocho años. Cada vez que pasa un avión
por encima de mi cabeza le observo sorprendido, cómo ese armazón de metal de
300, 400 o 500 toneladas va navegando sobre fluido gaseoso, que ni siquiera
alcanzamos a ver.
Vivo relativamente cerca de un
aeropuerto y suelo ver aviones que acaban de despegar o que van a aterrizar y
no puedo dejar de contemplarlos. Cuando lo estoy haciendo siempre me surge la
misma pregunta: ¿cómo se mantiene ese conjunto de metal tan pesado sin que
descienda o caiga?, ¡es impresionante!, aunque conozca su principio físico.
Desde antes que yo naciera vuelan
aviones, cómo que en todo este tiempo no ha avanzado nada o casi nada el
transporte aéreo personal. ¿Qué nos ocultan o por qué no ha interesado
investigar y comercializar el transporte aéreo personalizado o individualizado?
Me estoy refiriendo a artefactos seguros, tal como dicen de los aviones que es
el medio de transporte más seguro, para que una persona se siente en un tipo de
silla cómoda y te permita hacer vuelos rápidos entre dos puntos, si se quiere,
no demasiado distantes. ¿Se imaginan la gente volando en todas direcciones?
Unos que se dirigen al trabajo, otro que su medio de desplazamiento para hacer
su trabajo sea este, otros que lo utilicen para viajes cortos, para ir de un
punto a otro de las ciudades, etc. ¿Por qué no se ha avanzado lo suficiente en
este terreno, no ha interesado, sería una competencia a las líneas aéreas? Yo
creo que tendrían clientes suficientes como para que se convirtiera en un
negocio rentable, pero hay algo que impide su desarrollo. Si se mantiene en el
aire a cientos de toneladas cómo no se va a conseguir que vuelen unos cientos
de kilos. Por lo que sea, no interesa que se investigue en esa dirección.
Posiblemente, nadie invierte en este tipo de estudios, debido a las presiones
que sean. Sucede lo mismo con los coches eléctricos, con la generación de
fuentes de energía libres, con el aprovechamiento de la energía solar o con los
coches que conduzcan de un modo autónomo. Todos esos apartados van a ralentí,
no interesan a algunos que deben ser de la secta de los poderosos.
Hay tecnología suficiente para no
seguir anclados, en ciertos temas, en los años cincuenta o sesenta. Ya sé que
los coches de ahora poco tienen que ver, en cuanto a electrónica se refiere,
con los coches de antaño, pero el propulsor sigue valiéndose del mismo
combustible, que es lo que tratan de hacer perdurar a pesar de la contaminación
que produce. Con la energía solar sucede otro tanto de lo mismo, no se
desarrolla aun teniendo más horas de sol que nadie, porque están las empresas
generadoras de electricidad empujando para que no se le dé vía libre al
consumidor y pueda autoabastecerse. También existe tecnología suficiente para
que los coches condujeran solos, nos llevaran a donde necesitemos sin que nadie
tenga más que indicarle la dirección a donde pretenda ir, pero qué ocurrirá con
toda la parafernalia del carnet de conducir, las autoescuelas, las
renovaciones, etc. Por último está la investigación en fuentes de energía
libres, aquella dirección que inició el científico Nikola Tesla y que le llevó
a su perdición… por tratar de producir energía libre para todos y sin coste
alguno. Hay formas de hacerlo, pero igualmente no interesan a los que se han
hecho con el negocio redondo de servirnos electricidad al precio que ellos
deciden de acuerdo con los gobiernos, que como sabemos no cuidan nada o muy poco
a la ciudadanía.
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