Hoy quiero abordar un tema que
muchas veces pasa desapercibido, me refiero al tiempo que unos hacen perder a
otros, o bien, utilizan de los demás para hacer lo que ellos quieren hacer. Por
ejemplo: ayer tuve que ir a una notaría a firmar unos documentos, nos habían
citado a las 11 h, según nos dijeron son dos notarios en aquel establecimiento
o despacho, y como uno no había podido asistir, el otro notario atendió todos
los asuntos, los suyos y los del compañero, ¿qué sucedió?, pues que eran las 13
h y todavía no nos habían atendido. Dos horas tiradas en la sala de espera de
la notaría, ¿esto de qué manera lo compensa esa empresa?, de ninguna,
sencillamente has perdido tu tiempo; y cuando llega la minuta del notario te pega
una clavada seria, de la que por justicia se debería valorar el tiempo que nos
retuvo a todos, cinco personas. Siento que situaciones como esas son un abuso y
una desconsideración hacia los clientes, que quedan sin compensación de ninguna
clase.
Si por ley tuvieran que responder
de estos retrasos, las cosas cambiarían. Debería estar recogido por ley que
cuando te citan en cualquier empresa para atenderte y se retrasan, ese tiempo
que te hacen perder debería poderse rebajar de la factura que se produzca.
Evidentemente, con anterioridad se debe conocer el importe del servicio, porque
de lo contrario te clavan de más y la rebaja la abonas tú. Esta es una España
de pícaros… el que hizo la ley, hizo la trampa.
Tenemos una existencia limitada
en este plano, por lo que deberíamos ser todos muy considerados con el tiempo de
los demás. Es un tiempo muy importante para cada uno, no solo el tiempo es oro
en televisión, como dice esa frase hecha. En la vida de cada persona el tiempo
es muy valioso para hacer lo que le venga en ganas. Deberíamos ser dueños de
nuestro tiempo y hay trabajos que consumen mucho tiempo no aprovechado, como por
ejemplo el de comercial. Cuando visitas a un cliente tienes que hacer esperas
bastante largas, no siempre te puede o te quiere atender en el instante. Hay
cantidad de individuos que se dan importancia en consonancia al tiempo que
hacen esperar a otros, esto lo he sufrido en mis propias carnes aunque nunca
haya hablado de ello. Nunca vino al caso, pero hoy me he lanzado con el tema de
la notaría, que al final nos hizo perder más de dos horas, ¿quién las paga,
quién nos repone ese tiempo? Ya es imposible… esa empresa nos ha robado más de
dos horas a cinco personas que íbamos a firmar unos documentos, y parece que no
sucede nada, pero sí pasa algo, que se ha apoderado de más de dos horas de
cinco personas, aunque el sistema no le dé importancia a algo tan esencial… el
tiempo de las personas, horas irrepetibles tiradas por la alcantarilla, por el
poder de alguien sobre todos nosotros, por su posición de notario y por el
vacío legal existente.
Parece una tontería por lo
frecuente del caso y otras situaciones similares que se dan en la puerta de la
consulta del médico, en la puerta del taller cuando vamos a recoger el coche,
en las horas que se pierden esperando a un profesional que viene a darte un
presupuesto, o alguien que tiene que traer algo al domicilio y te anuncia una
hora de llegada, para dejarse caer una hora más tarde… nos hemos acostumbrado a
usar el tiempo de los demás y esto es inadmisible.
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