Cuando ya no se pueda respirar en
el Planeta, entonces será demasiado tarde para aplicar medidas. Entretanto, la
gente va enfermando: alergias, afecciones respiratorias de toda clase e
importancia, complicaciones cardiacas, pero parece que todavía no son
alarmantes o suficientes como para actuar. Los Gobiernos se lo toman con
tranquilidad, lo que es lo mismo que decir: dejando que cada uno haga lo que le
parece… al final, como es de costumbre el pato lo pagamos los más
desfavorecidos, ¿por qué digo esto?, porque toda la culpabilidad recaerá sobre
los vehículos más viejos, serán a los que controlen más y serán los primeros en
salir de circulación… nos dejarán sin herramientas para movernos. Los ricos siempre
podrán comprar los últimos modelos, pero eso sí, como mucho serán híbridos,
porque los políticos lo que no se han atrevido es a meterse con la industria automovilística,
les es más fácil hacerlo contra los pobres, que no tienen fuerza para hacerles
la “guerra”. En definitiva, si la situación es tan grave como parece, que hay
cantidad de ciudades españolas con los índices de contaminación elevados e
insoportables, ¿por qué no se han dejado de comercializar vehículos que equipen
motores de combustión interna?, ¿por qué no son todos eléctricos?, ¿por qué no
se ha fomentado una red de talleres especializados en convertir coches con
motores contaminantes en coches eléctricos? Nada de esto sucede porque los
políticos juegan a otra cosa y, los gobiernos ingresan mucho dinero con los
impuestos de los combustibles fósiles. Ahora no dejan de subir el precio de la
electricidad, me imagino que cuando alcance un nivel suficiente como para
rentar al gobierno en impuestos parecido a los combustibles contaminantes,
permitirán y fomentarán la comercialización de vehículos que sean solo
eléctricos… mejor si fueran solares para no tener que seguir con la dependencia
de los suministradores de electricidad.
A los políticos no les importa la
contaminación, de lo contrario legislarían para remediarla, pero no leyes de
maquillajes sino soluciones efectivas para aplicarlas sobre la marcha y no para
dentro de veinte años. Dentro de veinte años, cualquiera sabe cómo estará el
aire, si se podrá respirar o será puro veneno para nuestro organismo. Aun así,
hay cantidad de países que se niegan a acatar los ridículos acuerdos a largo
plazo que pactan en esas convenciones millonarias que se celebran en el otro
lado del mundo y donde todos se tienen que desplazar… ¡muy cómodo y un sistema
muy económico!, existiendo los medios tecnológicos tan eficientes para celebrar
una reunión on line en cualquier momento que acuerden. El sistema trata de
exprimir el limón hasta sus últimas gotas, aunque eso vaya en contra de los
intereses de las poblaciones. La importancia para los que imponen este sistema
caduco y corrupto mundial, está en los intereses monetarios. Lamentablemente,
en el mundo todo se mueve alrededor del dinero y, ¿qué es el dinero: papel,
metal?, hace tiempo tenía una razón de ser: cada país tenía que conservar una
reserva de oro equivalente a la cantidad de dinero que ponía en circulación,
ahora ni eso. El dinero en la actualidad, no es más que papel que se imprime
sin respaldo alguno, es como si usted o yo, tuviéramos unos moldes y unas
máquinas de imprenta e imprimiéramos billetes de nuestros países… es el mismo
fraude. El dinero solo es papel con unos dibujos y, que toda la vida de todas
las personas gire alrededor de esta falsedad, tiene lo suyo. Que podamos
comprar con papeles de mentira, que dediquemos gran parte de nuestro tiempo, un
tercio de nuestra vida o más, a servir a otros por un sobre de papeles impresos…
es demasiado. El sistema de mentiras acuerda que los papeles de este color con
este dibujo vale “X” y todo el mundo se acomoda a ello: el comercio, las empresas,
los bancos, la gente. Este es un sistema de esclavitud por el dinero. Podríamos
vivir sin dinero, pero eso es para personas inteligentes y que no pretenden
tener sometidos a los demás. Con los inútiles que gobiernan los países y los
ineptos que mandan en las organizaciones mundiales, seguiremos respirando
mierda y siendo esclavos de la consecución de papeles impresos, llamados
dinero. Ni un cuento llega a ser tan fantástico.
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