Si vieron
anoche, en la Sexta TV, al Presidente Revilla, se llevarían una impresión un
tanto desconsoladora del resultado de los últimos cuatro años de “desgobierno”,
que hemos tenido en España. Vino a decirnos que del total de personas que
trabajan actualmente, casi la mitad ganan menos de mil euros, y de esta mitad,
hay casi un seis por ciento que no llegan ni al SMI, 645 €.
Por otro lado
nos dijo que la masa salarial de todos los españoles a finales de 2011, cuando
se hizo cargo Rajoy del “desgobierno”, era de quinientos treinta mil millones
de euros. Sin embargo, a finales del 2014 había descendido en cuarenta mil
millones de euros, hasta los cuatrocientos noventa mil millones de euros. Esto
representa la depreciación de los salarios de los trabajadores de este país. Y
no hablemos del millón y medio de familias que no tienen ingresos, o de los
veinte mil millones de euros que hemos tenido que pagar, de más, en impuestos.
O sea, que no solo han caído los salarios, sino que hemos tenido que hacer
frente a un mayor desembolso tributario. ¿España va bien?
Además de todo
eso, hemos tenido que soportar una corrupción, sistémica, Institucional y
generalizada, que nos ha costado cantidad de miles de millones de euros. Sin
entrar en la evasión, de cantidades semejantes, a paraísos fiscales, que se
convierten en millones de euros que no tributan en “Hacienda somos todos, menos
los que evaden capitales”, que marean los dineros de un paraíso a otro, y de
una empresa pantalla a otra, o de un testaferro a otro; así hasta que le llega
el dinero blanqueado. ¿Esta es la locomotora económica de Europa?, ¿dónde está
el milagro económico español, Rato, para más señas? ¡Qué desastre!, pero
tenemos que estar contentos porque Rajoy ha dicho que esto se ha acabado y “ya”
no se le pasa a nadie ninguna.
Añadió
Revilla, que nadie hablaba de terminar con los paraísos fiscales, porque los
poderosos que los mantenían eran los mismos que nombraban o quitaban dirigentes
en los países. Eran los que aprobaban o desaprobaban políticas, en definitiva,
eran los que mandaban, y esto lo añado yo: “son los que juegan al Monopoly con
nosotros”.
El manejo de
estos individuos y de los que nos “desgobiernan” es execrable, digno de
meterles entre rejas. Son ellos los culpables de las miserias y el abandono que
padecen las poblaciones del mundo. Están reventando la ilusión de generaciones
que han trabajado, se situaron en un nivel social y económico, para dejarles a
posteriori sin trabajo o pobres. Y a los más jóvenes les han truncado las
ilusiones de futuro. Han eliminado la clase media de un plumazo, las mejoras
que dicen han provocado, no llegan a los ciudadanos, y lo cierto es que el país
se ha endeudado hasta el cien por cien del PIB.
Esto nos
sucede por permitir que jueguen con nosotros, por aceptar un modo de vivir hipotecándonos,
a base de créditos, y dejarnos influir por la falsa generosidad de estos
voraces personajes, yonquis del dinero, que nos vendieron facilidades para
adquirir mucho de lo que no era una verdadera necesidad, con unos intereses
desmesurados. Esa gente es especialista en la usura, hay que tener mucho
cuidado con ella, es realmente peligrosa. ¡No compres nada más a plazos, si no
puedes alcanzarlo, déjalo en la tienda!, ¡si quieren que compremos, que den
trabajos bien remunerados!
Esa gente
viene a enriquecerse a nuestra costa, no tiene cabida aquí. Deben dejar de
seguir comprando a nuestros políticos, y estos deberían dejar de venderse.
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