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Acabo de asomarme a la web de Change.org para saber cómo iba la recogida de firmas de un gesto ciudadano contra el poder impuesto, y con el que casi todas las personas con las que hablo están descontentas, entro en redes y sucede lo mismo, y no entiendo cómo no hay cinco millones de firmas. Deduzco que la gente se conforma con el primer plato que le ponen por delante. Protestan pero no reaccionan, y cuando se abre una puerta, aunque sea simbólica, de unión de la población contra un gobierno indecente, no machacan el botón de firmar... ¡Cada día entiendo menos!
Hay cantidad de gente, cada día más, que no quieren saber nada de política, pero como sabemos si algo nos afecta a todos, y no queremos entender, otros llegarán y harán los que deseen hacer, por lo general para su interés propio, para el de sus familiares y amigos. Si los ciudadanos desatendemos el modelo que nos han impuesto para gestionarnos, los parásitos de lo ajeno nos chuparán la sangre, no se arrepentirán, repartirán nuestros dineros para seguir comprando a cargos estratégicos para no ser sentenciados ni juzgados por sus fechorías. Esto parece que le dé igual a la gente, y quizás sea parte de la trama del poder, tenernos tan saturados de corrupción, que lleguemos a hartarnos y a aborrecer todo lo que huela a política, pero es que esos sinvergüenzas siguen en sus cargos, con sus leyes y sus autoridades compradas para hacer el desfalco cuanto mayor, mejor.
Si aspiramos a una sociedad bien distinta, si queremos que nos dejen de robar, de engañar y estafar, de hacernos promesas que incumplen, etc., debemos ser nosotros los que fijemos las reglas, el poder ha de ser nuestro, no de esos piratas, no de esos ladrones corruptos, no de esos gánsteres. Y para alcanzar el poder, que siempre debió ser nuestro, que somos los que corremos con todos los gastos del chiringuito, tenemos que luchar juntos y manifestarnos en cuanto alguien da un paso en ese sentido, y la firma de una moción de censura contra el gobierno presuntamente corrupto de Sánchez y sus amigos de bancada, desconsiderados con los ciudadanos, es una de esas oportunidades para decirles a las claras que el pueblo va por un camino diferente al que ellos, esos granujas, han tomado.
Si nos desentendemos de la política, nunca lograremos que los que legislan a su favor para poder cometer todas las acciones delictivas que les parezca, dejen de robarnos, dejen de malversar dinero público, atiendan los servicios públicos con carácter prioritario en lugar de las cientos de donaciones superfluas que el Gobierno efectúa. Yo estoy muy harto de que nos ignoren para hacer negocios oscuros en su beneficio. Lo primero es el bienestar de la gente y el progreso del país, todo lo demás, pertenecer al club de la UE, de la OTAN, chupar las suelas de los zapatos de EEUU, regalar dinero a diestro y siniestro, creer en una falsa democracia, etc., son cuentos chinos. Arregla tu país, y hazlo un país de primera, después ayuda cuanto puedas.
Seguiremos...
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