La existencia de ONG y otros chiringuitos de los que dicen están para prestar ayudas a desfavorecidos, representan el fracaso de la gestión gubernamental, lo lógico es que no existieran, que no tuvieran que prestar ayuda a nadie porque nadie debiera estar en situación de desamparo. Volvemos a lo mismo una y otra vez, porque se gobierna para unos pocos y con un propósito claro, que una parte ínfima de la población se enriquezca a costa del resto de los ciudadanos. Si se gobernara con conciencia humana, a nadie se le dejaría caer, habría trabajo para todos, se repartiría la riqueza más igualitariamente y todos podríamos vivir más dignamente. No hablo de socialismo o comunismo, que es lo que rápidamente dicen unos u otros, solo empleo mi sentido común, el que contempla a los demás porque en mi conciencia sí caben, no solo los míos, que es lo que suelen espetar muchos: "Yo, con que estén bien los míos, a los demás que les den". Lo habrán oído un sin fin de veces, ¿verdad?
No tendrían que existir esas ONG y demás chiringuitos: comedores sociales, bancos de alimentos, etc., porque de algún modo impiden que se le exija al gobierno el cumplimiento de sus obligaciones: Saber gobernar para que lo que dijimos antes sobre dejar gente atrás, sumidos en la pobreza, no suceda. O sea, que el gran favor se lo hacen al gobierno enmascarando sus deficiencias, que es por lo que los gobiernos, agradecidos, les bonifican con dinero público, incapaces de crear los puestos de trabajos necesarios para que todos tengan sus ingresos, que es al fin y al cabo de lo que trata vivir en esta sociedad.
Los gobiernos lo arreglan todo soltando cientos de millones de euros de dinero público, que no van a servicios públicos esenciales, porque tienen urgencia por tapar sus vergüenzas y hacer callar a la población afectada de la pobreza que los gobiernos provocan en la población. Lo esencial es que todos tengamos un puesto de trabajo, por ahí se ha de empezar, y no que siempre están en lucha con la patronal para conseguir ventajas para los que trabajan, que sí, que hay que hacerlo, pero antes debe estar la lucha sincera por conseguir puestos de trabajo para todos, esa debe ser la primera exigencia de cualquier gobierno, todos trabajando, y todos con salarios. A partir de ahí hagan las gestiones que quieran, pero sin robarnos, sin malgastar nuestro dinero, sin malversar y sin regalarlo sin ton ni son.
Los gobiernos no saben donde están de pie, por eso no hacen las cosas adecuadas y urgentes, dejan a la gente sin empleo, no atienden adecuadamente los servicios públicos esenciales, privatizan las empresas públicas estratégicas y rentables, venden España a cachos y permiten que terceros nos dicten las leyes que debamos cumplir. Lo que sí saben todos, es meter la mano en la caja, lo hacen de maravilla.
Seguiremos...
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