Los militantes del PP no están
acostumbrados a cumplir con sus obligaciones y no pueden votar en las
primarias, le sucede lo mismo que al partido. El PP confecciona unas normas
para realizar primarias, pero cuando ven que la votación va a dar los
resultados de la votación de una clase de un colegio, están dispuestos a
cambiar sus propias normas. Ni pagan cuotas de partido, ni cumplen normas… será
una cuestión de Estado… así es el PP: estudios no cursados, mala gestión
gubernamental, amnistías anti constitucionales, impunidad para los corruptos,
pobreza para la ciudadanía y riqueza mediante privatización para amigos,
familiares, empresarios que hacen donativos de dinero en negro y banqueros a
los que se rescatan o se les permiten comprar bancos por 1 euro.
La estructura peperiana da para
mucho más, pagos de reformas en negro, financiación ilegal, contabilidad en B,
sobresueldos en negro, fraude al fisco, premiar con embajadas a los que lo han
hecho pesimamente y proteger el legado del dictador: como firmar in extremi el
ducado de Franco, defender el Valle de los Caídos, subvencionar la Fundación
Franco o a los matones del régimen de Franco, como Billy el niño y otros muchos
polis condecorados por torturar a ciudadanos.
Ahora se han vuelto locos, los
siete candidatos dan vueltas por España tratando de ser los más votados para
heredar el cargo de responsable del polvorín popular (PP)… ¡hay que estar loco
de verdad! Comprendo que los que han mamado PP desde jovencitos y tienen el
cerebro lavado o hueco, actúan como autómatas programados, solo saben hacer lo
que les dice su software bien instalado; son incapaces de ver más allá de sus
narices, no tienen neuronas disponibles para reflexionar al margen de lo que
está grabado a fuego en el interior de sus cabezas… ¡qué pena!, gente joven
preparados para un proyecto político mafioso como hemos podido comprobar,
¿acaso se presentan habiendo renovado los ideales, con un programa nuevo? Se
presentan para hacer más de lo mismo, algo que convendrá mucho a las élites
pero a la ciudadanía nos empobrece, yo no les quiero, he terminado asqueado de
Mariano y del conjunto de palmeros que le arropaban.
España necesita otra cosa, las
leyes no se pueden parecer a la incapacidad de los juzgados, hablan que en dos
años no da tiempo para cambiar las leyes, ¿cuánto tiempo se necesita para publicar
en el BOE un acuerdo de la mayoría de la Cámara?, si eso es así, vuelvo a
pensar en lo inútiles que son los que nos han gobernado y los que nos
gobiernan. De nuevo debo pensar que el sistema legal español es arcaico, lento
a propósito, e inservible para producir algún cambio real en la sociedad
española. ¿Cómo hay tanto títere actuando en la gran obra de la mentira de la
política española? Si es por dinero me lo explico, se aseguran el trabajo y los
buenos sueldos al menos por cuatro años, como dicen no pretenden ser
profesionales de la política pero una buena parte de ellos no sabe hacer la “O”
ni con un canuto si hablamos de buscarse la vida con las carreras
universitarias que dicen haber aprobado… ¡perdonen!, a estas alturas de la
vida entenderán que lo mencione con cierta sorna. Por aquí abajo, por Andalucía
se suele decir cuando se detesta algo: “No lo quiero ver ni en pintura”, pues
eso digo yo del PP.
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