Más rápido
presentan al sinvergüenza Soria para el puesto de directivo del Banco Mundial,
más rápido renuncia al mismo, según él, por las presiones que se han generado
entre la gente. Ahora le va a importar a él y al PP lo que la gente pensemos,
esto es nuevo o hay algo detrás de toda la movida. Ya que Soria estaba
amortizado, le han podido pedir este favor para poder hacer creer a la gente en
la regeneración perdida del PP. También ha podido ser utilizado para distraer
la atención sobre el fracaso de la investidura de Rajoy o de los primeros
movimientos de Sánchez, y que la atención de la gente se vuelva a centrar en el
PP, aunque sea para volver a hablar mal.
Ha sido todo
tan calculado desde el principio que cuesta creer que todo haya salido al azar
y no sea un cúmulo de movimientos bien pensados, una estrategia bien meditada.
Se esperó un par de minutos que finalizara la fallida investidura de Rajoy para
hacer pública la noticia de la propuesta de Soria, por parte del Gobierno, para
el cargo referido en el Banco Mundial. Noticia que ya sabían indignaría a la
ciudadanía, y a partir de entonces, esperar acontecimientos para dar las
respuestas que exijan el guión, como así ha sido para convencer de que el PP,
al final, hace lo correcto atendiendo al malestar originado en las personas de
este país.
Quizás lo han
pensado mejor, y tan solo haya sucedido que como se reactivan todos los
procesos judiciales, y el PP se lleva la palma con mil y un procesos abiertos
que le afectan directamente a ellos, es posible que hayan llegado a la
conclusión de que el material acumulado iba a sacar de las casillas a más de
uno. De aquí a final de año nos esperan semanas y semanas de información acerca
del desarrollo de los juicios y de sus correspondientes sentencias, que si se
ajustan a derecho y pueden ser aplicadas libremente, sin que el Gobierno ejerza
sus presiones de costumbre, dejarán un panorama oscuro de la corrupción del partido
y de sus integrantes en la mente de la ciudadanía. Es por ello, que han optado
por calmar un poco los ánimos.
Bienvenida sea
la noticia, sea cual sea su trasfondo, porque en algún momento todo este asunto
de privilegios y corrupción debiera de revertir, y si este significa el primer
paso, reitero: “Bienvenida sea”. Lo que sucede es que tras cinco años de hacer
lo que les ha venido en ganas, resultan poco creíbles. Ahora que han perdido la
investidura y, tal vez, la posibilidad de volver a gobernar España en la
próxima legislatura, es fácil ejercer la docilidad y hacerse pasar por buenos
para que el elector se apiade de ellos… “pobrecitos, si no son tan malos, les
voy a volver a votar”.
Tan solo están
estirando los tiempos, ya vienen las elecciones vascas y gallegas, y el PP
tiene esperanzas que dependiendo de los resultados que arrojen ambas elecciones,
ellos puedan ofrecer ayuda a algunos partidos vascos o gallegos, y sean
correspondidos en una tercera investidura. Por eso digo, que el PP no pega tiro
al aire, carga el arma y espera paciente a que pase el enemigo por delante para
hacer blanco. Están en ese compás de espera y con esa estrategia entre las
manos, por lo que me hacen pensar que todo este movimiento de ajedrez del
tablero Soria y banco Mundial, puede estar pero que muy bien calculado.
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