Hace unas semanas alguien me
recordó dos pensamientos importantes, que se condensan en dos cuestiones muy
sencillas, y sus respectivas respuestas igualmente simples, pero no por ello
menos transcendentes.
Hace dos días paseaba por mi
urbanización y unos chavales, un tanto hippies o modernos, estaban preparando
una de esas furgonetas que acondicionan para viajar, dormir dentro y hacer vida
en ellas y con ellas. La puerta lateral de la furgoneta estaba abierta y mi
curiosidad me hizo mirar en su interior. Estaba forrada de madera, de un modo
un tanto rústico, o sea, con maderas recogidas de la calle, trabajadas por
ellos mismos. Con tales maderas habían construido unas especies de muebles:
cajones, puertas o encimera, me pareció apreciar en aquel vistazo; pero lo que
más me llamó la atención es que en las maderas habían escrito, a modo de
recordatorio, una de las respuestas a una de las cuestiones que mencionaba al
principio del escrito.
Ya estarán impacientes por saber
de qué se trata tan inesperada coincidencia. Fue una coincidencia, puesto que
llegaron ambas informaciones en dos lugares diferentes y en dos momentos
distintos, pero lo tuve que ver y es que la magia de la vida obra así… quería tener
la seguridad de que ese contenido me hubiera llegado. En definitiva, las dos
cuestiones a las que me referí eran: ¿Cuál es el mejor lugar del mundo para ser
feliz? y ¿Cuál es el momento más importante de tu vida?, ya pueden pensar si
quieren. Cuando se harten de darle vueltas al disco duro, es posible que hayan
elegido o tenido visiones de situaciones o lugares maravillosos, pero ya les
digo que se estarán engañando porque una vez más no han estado presentes,
abandonaron la realidad para soñar, para imaginar, para rebuscar en lo que fue
pero ya no es.
Pasemos a contestar a sendas
cuestiones y ya veremos qué resulta de todo ello. Pasemos a la primera
pregunta: ¿Cuál es el mejor lugar del mundo para ser feliz?, ¿siguen pensando
en algún lugar especial, vieron algún paisaje que les sorprendió o les
maravilló, etc.? Tienen que dejar de soñar, solo es eso, están soñando, están evadiéndose
de la realidad… el mejor lugar para ser feliz es este en el que te encuentras
en este preciso momento y en cada momento, en cada minuto, en cada segundo…
esto ya hila con la segunda cuestión: ¿Cuál es el momento más importante de tu
vida? De nuevo estará el disco duro sacando información almacenada, te estará
ofreciendo mil y un momentos que has vivido, pero de nuevo abandonaste la
realidad y dejaste de estar presente. El mejor momento de tu vida es ahora,
justo este instante que estás viviendo, en el que eres consciente de lo que sucede,
en el que puedes actuar y decidir… es ahora.
Como has podido comprender es
bien fácil, lo fundamental en tu vida sucede donde estás y en ese preciso
instante. Es lo que alguna vez habrás podido escuchar: Aquí y Ahora. Así lo han referido algunos sabios, algunos maestros
espirituales, es lo que hoy te recuerdo como a mi me lo recordaron hace unas
semanas y, posteriormente, la puerta abierta de aquella furgoneta, mi
curiosidad y estar presente en el instante, todas esas circunstancias,
aparentemente fortuitas, hicieron que lo volviera a ver y recordar.
La magia de la vida siempre está enseñándonos,
dándonos señales, basta con estar atentos y atentas. Cuando mires, trata de
ver. Cuando escuches, trata de comprender, para ello siempre, en todo instante,
has de estar presente.
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