En la sexta, los jueves a las
22,30h, están emitiendo un programa llamado: el enviado especial, que
muestra un mundo que parece de otra galaxia comparado con nuestra pobre España.
Es ahí, viendo lo que están desarrollando en otros países, cómo invierten en
tecnología e investigación, es cuando me doy cuenta que somos un vagón de cola.
Si no lo crees, entra en la web de la Sexta y visiona algunos de los títulos ya
emitidos y juzga por ti mismo/a. Hasta el momento he visto tres programas: El
imperio de los robots (Japón), El país de la educación (Singapur) y
El
laboratorio del futuro (Massachusetts), todos fabulosos, llenos de
contenido que te abren los ojos y te hacen preguntarte a qué juegan los
dirigentes de España, incluso, si hay dirigentes o solo hay aves de rapiña
sobrevolando el monedero público, a ver qué pueden sustraer. ¡Vaya envidia
sana!, comprendes que se puede hacer mucho más, que casi no hay techo, las
zancadillas las ponen los nefastos políticos que hemos tenido y tenemos,
ninguno vale ni un euro, así de rotundo lo digo después de ver todo lo que se
puede hacer cuando el objetivo se pone en la gente. Un denominador común es
facilitar la vida a la gente, localizar dónde hay problemas y tratar de buscar
soluciones educativas y técnicas para sobresalir, buscar la excelencia
auténtica, no como los curriculums abultados y falsos que hemos conocido
últimamente.
En Japón la población mayoritaria
es anciana, debido a la longevidad y al escaso número de nacimientos. Los
robots son una solución para integrarlos en las empresas y sustituir la mano de
obra necesaria que no se pueda cubrir con humanos. Nadie se mostraba temeroso a
que llegara el día en que las máquinas les quitaran sus puestos de trabajo,
todos y todas manifestaban que siempre habría cosas que no podrían hacer los
robots. También coincidían en decir que hacen falta personas para supervisar el
trabajo realizado por los robots. Se buscaban miles de aplicaciones
informáticas, robóticas y domóticas para facilitar las tareas de todo tipo y en
cualquier entorno. Ya habían conseguido un nivel de funcionalidad en
inteligencia artificial, que los humanoides podían mantener conversaciones
totalmente autónomas con sus usuarios. Otros robots eran empleados como terapia
de acompañamiento y entretenimiento, con los que se puede conversar tal como lo
hacemos con un amigo u otra persona. Muestran un modelo de bares donde te
sientas en una mesa, que está equipada con una pantalla táctil donde ordenas la
comanda y en unos minutos por una especie de cinta llega la bandeja a tu mesa
con lo que pediste. En otra imagen se ve que van en bici por la calle y llegan
a un parking de bicis subterráneo, metes la bici a nivel de la calle, pulsas un
botón y la aloja en un lugar determinado hasta que vuelvas a por ella, todo el
proceso es automático, sin el concurso de ningún empleado… y mucho más.
Si me extiendo en los otros dos
como he hecho con el de los robots, necesitamos varios folios y te aburrirías,
lo mejor es que los veas. Singapur era un pueblo de pescadores y se modernizó
en cuanto a construcción se refiere, al mismo tiempo que apostó por la
educación como base para conseguir tener una población con futuro, la mejor
preparada y dedica un 25% de su PIB a la educación. Los centros donde imparten
clases tienen instalaciones, por ejemplo talleres para realizar prácticas, que
ya quisieran algunas empresas. Se observaba el respeto que se le tenía al
profesorado, todos y todas se levantaban al entrar el profesor, se le veneraba
y se le valoraba como una figura fundamental en la educación y preparación de
los jóvenes. Los profesores estaban muy bien pagados, decían que tenían
salarios del orden de unos setenta mil dólares anuales, eso viene a ser cinco
mil euros mensuales. Habían conseguido un método de aprendizaje propio que
llamaban el método Singapur, que parece da tan buenos resultados, que se estaba
exportando a otros países. En matemáticas son números unos.
Por último, y por adelantar algo
del centro MIT de Massachusetts, solo introducirlo diciendo que diez premios
nobel imparten clases, actualmente. Cualquier disciplina tiene cabida, abren
las puertas a la investigación, a que se apueste por cualquier idea y ponen
todos los medios para que se pueda desarrollar. Muestran cantidad de proyectos
en los que se está investigando, hacen un concurso anual dotado con cien mil dólares
para el proyecto que más puede beneficiar a la humanidad. Son tantas imágenes e
ideas que han mostrado, que se me amontonan en la cabeza: vehículos autónomos,
trenes de altísima velocidad (1200 Kms/h) que viaja al vacío, sin rozamiento,
por el interior de unos tubos, soluciones modulares robóticas para modificar el
mobiliario de pequeños apartamentos y
hacer un mejor aprovechamiento de su superficie. Digo como en los casos
anteriores, hay mucho más… no se lo pueden imaginar, por favor véanlo si
pueden, no habrán perdido el tiempo, le dará una visión global de lo que está
sucediendo en el mundo y, también, le ayudará a comprender dónde estamos
nosotros.
No hay comentarios:
Publicar un comentario