Anoche emitieron un programa en
la sexta televisión, donde nos acercaron a Beppe Grillo, líder del Movimiento 5
Estrellas, italiano. Y mi conclusión es la de ser una persona indignada con la
corrupción política de su país, así como con la política de austeridad impuesta
por Europa. Un luchador que ha tomado el pulso de los ciudadanos y ha tenido la
valentía de remover lo mohoso e inamovible de una casta política acostumbrada a
campar a sus anchas. Esta actitud tan poco común en climas conservadores, donde
nada pasa, y donde todo sigue como unos pocos quieren, se considera peligrosa.
Con el éxito obtenido en las
urnas italianas en las últimas elecciones por el Movimiento 5 Estrellas, se
cargan las tintas contra este movimiento diciendo cosas como: “Complica las
opciones de formar un Gobierno estable”, vuelven a querer que no suceda nada.
El poder alemán ve en Italia un
riesgo de inestabilidad a su política de extrema austeridad, con posibilidad de
contagiar a otros países. Y amenaza lanzando frases como: “Va a elevar el
riesgo de inestabilidad de los mercados”, me pregunto: ¿Los mercados que son
como buitres a la espera de reprimir, vetar y terminar con el bienestar de los
países? Berlín solo sabe meter miedo para tratar de controlar una situación que
se les va de las manos, pues son los italianos los que han hablado en las
urnas. ¿O es que cuando sale una opción no deseable, la decisión de los
ciudadanos en las urnas no es democracia?
Los italianos no quieren solo
sacrificios y más sacrificios, porque las previsiones económicas siguen
empeorando la situación, por lo tanto habrá que hacer algo distinto. No se
puede seguir hasta el abismo a los centros de poder como son: Alemania, el BCE,
el FMI, y el conjunto abstracto llamado mercado. Todos hablan de los mercados,
¿Quiénes son, no tienen cara?, ya estamos hartos de sus juegos que les sirven
para enriquecerse con la situación que han creado, mientras que ese juego
macabro arrasa la economía del mundo.
A todos los nombrados anteriormente,
y ante mi desconocimiento de quiénes son los mercados, habrá que tener en
cuenta al G-20, al G-7, al grupo Bilderberg, etc., pues todos ellos, grupos de
poder, dictan desde la libertad que ellos se asignan, cuales han de ser las
próximas jugadas en el panorama mundial; como si jugaran una partida on line de
monopoly, repartiéndose poder y negocios lucrativos.
Con el triunfo de los 8,6
millones de votos conseguido por el Movimiento 5 Estrellas, la ciudadanía ha dado
un puñetazo en lo alto de la mesa, a modo de rebelión contra la corrupción de
la casta política y contra las recetas ultraliberales dictadas por Bruselas y
Berlín.
El Movimiento 5 Estrellas
preconiza un referéndum sobre el euro, y cuestiona las políticas de austeridad.
Como no puede ser de otro modo, la defensa de este sentir del pueblo es el que
choca con las directrices germanas y produce inquietud, tachada de
desequilibrio o riesgo por los poderosos, que ven peligrar su partida de
monopoly, así como el fin de su enriquecimiento.
Desde Francia, su presidente Sr.
Hollande, que parece hacer buen uso del sentido común, propugna que el
crecimiento ha de ser el corazón de la estrategia a seguir, que se debe ahorrar
y equilibrar las cuentas sin que ello debilite la economía. Demasiada
austeridad solo conduce a menos actividad y más desempleo.
En Italia hablan de
ingobernabilidad y de situación dramática la provocada por los resultados
obtenidos en las urnas en las últimas elecciones, y se atreven de
responsabilizar a Beppe Grillo de promover la antipolítica.
El interés del ciudadano choca de
plano con los intereses de los sistemas legislados y comandados por los poderes
fácticos. Estos si que son los responsables de nuestra ruina, de las carencias
económicas, de las cifras tan elevadas de desempleados, del bajo consumo actual
debido a los bajos salarios de sus reformas laborales, y de la caída libre y en
picado que sufren los países del mundo, y en especial los de Europa.
Promover una reforma profunda de
las instituciones, de la política y hasta de la moralidad pública y privada del
país; renovar a los viejos dinosaurios, aferrados al sistema político italiano,
con personas jóvenes universitarias, con ideas innovadoras, también más
ecologistas, etc., hace temblar a todo un bloque político oxidado y acomodado
que se niega a dar paso.
Todo el revuelo se debe a que ha
triunfado un programa político progresista, que rompe la continuidad del
inmovilismo político que exhibe su coraza democrática, para mejorar su imagen
de poder corrupto y conservador.
Asímismo, el Movimiento 5
Estrellas mantiene la actitud de no pactar con ninguna fuerza política, lo cual
es de aplaudir. Ellos han sido votados para defender un programa, y como dicen:
“Votarán en el pleno las leyes que reflejen su programa, sea quien sea que las
propongan”, creo que es una medida muy recomendable de respeto a su electorado,
de la que deberían tomar nota en otros países donde es habitual desbancar a la
fuerza más votada, mediante pactos que solo tienen un interés, el poder; en
lugar de solucionar los problemas de los ciudadanos.
Felicito a Beppe Grillo y a los
integrantes del Movimiento 5 Estrellas, por su valentía, por su éxito y por el
esfuerzo que hacen para desmontar los trasfondos oscuros de la corrupción política
italiana. ¡Ojalá lo consigan!, será un ejemplo, un antes y un después, en la
rigidez de los sistemas, que se llaman democráticos, y que se creían
irremplazables.
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