A veces se es tremendista cuando
atacamos la organización, yo lo soy también cuando dejo correr mi indignación,
cuando trato de tomar y sentir el pulso a la situación actual, y lo lamento.
¿Es arrepentimiento, es resignación o es cansancio?, no se pero me harto de
repetir la lucha infructuosa contra un
sistema que me rebasa, que se erige como una pared de frontón.
Me harto de tirar y tirar de algo
que es muy pesado para arrastrarlo, para moverlo, para eliminarlo, para abrir
paso a la esperanza de la gente, para barrer el desencanto generalizado de la
sociedad. Medito buscándome, miro en el interior y me hallo en horas bajas, no
encuentro la alegría de otras veces, estoy surcando un punto de deflexión de mi
propia ruta.
En este justo momento me
cuestiono la lucha, si es acertada, si la vida se merece este desgaste, si
volver a la monotonía tiene sentido, si algo tiene sentido en estas horas bajas
que todos tenemos, y donde me siento hoy sin razón alguna.
No soy consciente de la razón,
pero debe haber alguna para que me sienta así. Es como si me faltara algo, es como si algo no se
terminara de completar, siento la ausencia del ser, hoy yo no soy, no estoy
cuando el día ha nacido tan bello, tan despejado, y el sol brilla tan limpio
tras unos días de lluvia. Esto debería alegrar mi corazón, pero por no se que
causa eso no sucede.
Miro hacia fuera, a través de la
ventana de mi dormitorio y veo el jardín tan calmo entre luces y sombras, las
que provoca el sol entrando por entre los árboles, hay mucha luz y esto debiera
ser suficiente para exaltar mi alegría, para tornar el vacio en algo más
sustancial, pero hoy no, no se porque no ocurre.
Voy a desayunar, y voy a comenzar
a hacer algo en el jardín, voy a activarme a ver qué pasa. Espero que cambie mi
chip y en el siguiente escrito vuelva a imprimir aliento a las letras, porque
en estos momentos poco puedo ayudar a nadie, y a mi me gusta compartir pero
sobre todo lo bueno, para que nos contagiemos de la ilusión y del amor
necesario para vivir con alegría.
Un beso para todos, espero estar
mejor en el próximo escrito. Como diría en términos ciclistas, cuando suben un
puerto de importancia, esto habrá sido una pájara.
No hay comentarios:
Publicar un comentario