Hoy, domingo, es un buen día para
ayunar, para ayudar a nuestro cuerpo dejándole descansar, bebiendo líquido:
agua, caldos de verduras o infusiones. Hoy es un fantástico día para caminar,
pues el ambiente está limpio por las lluvias de estos últimos días. Es un día
maravilloso para pensar en nosotros mismos, para reflexionar, para meditar,
para hacer una sesión de yoga o taichí, para hacer una lectura que nos guste…
para recogernos y hacer de este domingo un día muy especial.
Me he levantado y lo he
presentido, hoy es un día extraordinario, todo está bien y mi predisposición
para darle a mi cuerpo el reposo que necesita, es estupenda. Es por eso que
como no puedo pasar sin escribir, mi otra gran pasión: comunicarme a través de
las letras, me he puesto manos a las teclas… y a compartir. He bebido agua, he
practicado orinoterapia como medio de salud adicional, he caminado cuatro
kilómetros y medio (tres vueltas a la urbanización donde vivo), he tomado una infusión de té verde, menta y
manzanilla, además de ir al baño muy satisfactoriamente. Posteriormente, he
encendido mi ordenador y aquí estoy con ustedes, vertiendo letras en el
documento con el propósito de acompañaros cuando lo leáis, y si en algo os
ayudo, ya sería “lo más”, el completo.
Podemos hacer de este domingo un
día diferente y eso dependerá de cada uno de nosotros. Pensad en la cantidad de
años que nuestro cuerpo lleva haciendo las mismas tareas. Pensad en la cantidad
de kilos de comidas inapropiadas, a veces, que habremos ingerido. Pensad en el
volumen de sustancias perjudiciales para nuestra salud, que muchos siguen
tomando cada día. Pues cuando toméis conciencia de ello, pensad si es justo
darle a nuestro organismo la oportunidad de limpiarse, de desprenderse de parte
de esos depósitos que se acumulan en forma de grasa. Nadie se va a morir por no
comer un día, sino que por el contrario, va a beneficiar a su cuerpo. El
líquido ingerido va a limpiar como si fuera un disolvente, va a arrastrar
sustancias no adecuadas para nosotros. Hay que beber más de lo que normalmente
bebemos y hay que asegurarse de ir al baño, incluso más veces de lo que se va
habitualmente, porque la porquería tiene que salir. Para ello, sería
recomendable tomar infusiones que propicien las deposiciones y las
evacuaciones, aunque solo sea para este día. Hay plantas idóneas para esas
funciones como: Cola de caballo (diurético), u Hojas de Sen y Cáscara Sagrada
(laxantes y depurativas).
Ya sabes, no lo dejes de hacer,
puedes mejorar tu salud con métodos tan sencillos como dejar a tu cuerpo, un
día a la semana, en descanso. Lo hidratas bien tomando suficiente agua e
infusiones, hace ejercicio moderado y vida tranquila, no nos vienen bien las
refriegas, los cabreos, las discusiones y el estrés. Esa forma de vivir junto a
la mierda que nos están vendiendo y que mucha gente está metiendo en sus
cuerpos, provocan graves trastornos de la salud. Enfermedades que irán dando la
cara a lo largo de nuestras vidas, atacando nuestros cuerpos obesos y viéndonos
obligados a tomar más venenos (las medicinas actuales, llenas de
contraindicaciones). ¡Cuídate hoy, para tener salud hoy y mañana!, es así de
sencillo. Lee las etiquetas de lo que compras, que cada día se parecen más a
los prospectos de las medicinas; cada día los alimentos tienen más química
añadida, más sustancias ajenas a la naturaleza, sintetizadas en laboratorios,
por lo que nuestros organismos no las reconocen, provocándonos alergias
alimentarias. ¡Coge, de una vez, el timón de tu vida!, ¡no dejes que te la
arruinen!
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