No nos cuenten más cuentos, dígannos
alguna verdad, gánense el sueldo, ¡basta de escándalos!, muestren respeto, sean
considerados con la gente, pónganse a la altura de la población, vivan los
problemas de la ciudadanía. ¿Les han enseñado lo que es la educación, los
valores tales como la honestidad, la honradez, la coherencia, la generosidad,
la solidaridad, etc.? Yo creo que no. Creo que nadie les ha mostrado a vivir en
sociedad, es una asignatura pendiente para casi todos, pero lo curioso es que
todos los políticos sean así. O lo da el nivel social, o se contagia como una
mala gripe, aunque viendo la repugnancia de sus actos, yo diría que más bien se
trata de la peste.
No podemos pensar mejor de
ustedes y sí os podemos meter en el mismo saco, porque no oímos a algunos de
ustedes denunciando a compañeros delincuentes y corruptos. Por tanto, he de
considerar que todos ustedes están contagiados y enfermos, tienen parecidos síntomas
y delata vuestro comportamiento que estáis infectados. La vida política del
país es la Unidad de Cuidados Intensivos deslocalizada, o sea, que no se halla
dentro de un hospital, sino que los enfermos se encuentran por los pasillos del
Parlamento, en los escaños, en los platós de televisión, en reuniones secretas
celebradas a espalda de la ciudadanía, o bien han dado una escapada a algún paraíso
fiscal, porque se tiene que financiar alguna campaña o pagar alguna reforma de
alguna de las sedes del partido o el piso del nuevo Director General de
Tráfico. Los bloques de viviendas pasaron a la historia, igual que las
rotondas, poner la primera piedra, hacer una autopista o la línea del AVE.
Todas ellas, motivo de contrataciones, normalmente sobre dimensionadas y a
pesar de ello, siempre nos han costado algunos miles de millones más que los
presupuestados. “Dos mil, tres mil,
cuatro mil… doce mil euros… dos millones de pelas”, comisiones a tutiplén,
repartos de dinero en cajas de puros, en sobres, en bares, dentro de los
coches, en maletines dejados por los fontaneros o los montadores de IKEA. Blanqueos
a plena luz del día… toma estos dos billetes de 500 €, e ingresa de tu cuenta,
como si fuera una donación hecha al partido, 500 € tuyos, ¡viva el pitufeo!
¿Cuántas barbaridades han
cometido esos indeseables que dicen que no son todos?, ¿Cuántos abusos hemos
tenido que soportar nosotros, que sí somos todos? Lo peor es que esto no se ha
acabado, puesto que los mismos delincuentes siguen en los mismos cargos o,
simplemente, se mudaron al despacho de al lado; antes eran ministro de tal, y
ahora son ministro de cual. Ali Babá sigue en su cargo, ese no se ha movido,
siendo un milagro que se haya mantenido… al final los del PSOE le hicieron el
regalo de dejarlo en el cargo. Así que la cuadrilla de asaltadores de camino
sigue al completo, lo único que nos ocultan es cuál será el próximo golpe, que
mucho no se hará esperar. Si celebran un par de congresos más, o si tienen que competir
en algo con los adversarios políticos, se buscarán un movimiento de dinero para
que comisione. Inversión en compra de armas para la defensa, vehículos
oficiales, reformas en algunas Instituciones, etc. No se preocupen que ya nos
enteraremos… nos seguirán robando… es lo que mejor saben hacer.
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