El Trama-bus de PODEMOS, me
parece una idea genial, es un restregón de la mierda política por las ciudades,
para que la ciudadanía se entere de una vez lo que hemos tenido, y tenemos,
metido en las Instituciones españolas. Esta iniciativa la considero una lucha
en la calle contra la corrupción, algo que casi ningún partido se permite, una
vez conseguidos los asientos del Congreso. Prefieren el confort del buen sillón
y tener un micrófono para decir cuantas mentiras se les antojen.
Desde el PSOE, el partido con
menos originalidad del mundo, cuando se rompió y salió al paso la gestora, la
palabra “consigna” era: coser; decían que había que coser el partido, y todos
los entrevistados de ese partido no sabían decir otra cosa; se dan la orden y
todos utilizan el mismo término, por tanto oído uno, oídos todos. Ahora la
palabra consigna o clave es: “repugnante”. Así califican la idea de PODEMOS,
por aquello de haber puesto la imagen de
Felipe González junto a Rato, Blesa, Bárcenas y Cía. ¡Qué memoria más corta
tienen los del PSOE!, ya no recuerdan el caso de corrupción y financiación
ilegal de su partido: Caso Filesa. Tampoco han de recordar cómo se usó el
Estado para confabular al GAL. ¡Con qué facilidad se atiza al contrario por la
mierda ajena, y qué pronto se olvidan de la mierda propia! Yo creo que ha
habido corrupción siempre, los que han tenido poder para saquear lo han hecho y
han acudido dopados a las elecciones; o sea, no se han dado las mismas
condiciones, no ha sido una lucha limpia. Lo que significa que casi siempre
hemos sido gobernados ilegalmente por los que, supuestamente, habían salido
elegidos de las urnas; pero habría que decir, que no fueron frutos de unas
elecciones transparentes ni de comportamientos políticos honestos. Para mí,
repugnancia es lo que están cometiendo los que gobiernan cuando nos roban, nos
engañan, nos manipulan o legislan en contra del bienestar general de la
población; algo que hacen constantemente.
El Trama-bus además de pasar por
todas las ciudades españolas para que la gente tome conciencia, debería haber
un segundo Trama-bus, permanentemente, aparcado a la puerta de entrada al
Congreso, para recordarle a los políticos lo que son muchos de ellos. ¡Qué
casualidad!, todo un partido puede estar podrido, pero los que mandan en el
partido siempre se libran de cualquier responsabilidad; es como si en cualquier
empresa se hiciera lo que quisiera el contable, el jefe de almacén, el jefe de
los técnicos… pero, el puto jefe no se enterara de nada de lo sucede en su puta
empresa… es que no es creíble; esto no pasa en ninguna empresa de este país y
tampoco en ningún partido político. Lo que ocurre es que hay cantidad de
bandidos y cantidad de pelotas chusqueros, a los que les faltan reaños para
poner las cosas en su sitio y llamar a las cosas por su nombre: “Un vaso es un vaso, un plato es un plato”
y una mafia es una mafia.
No vale seguir pensando que son
todos iguales, y justificar por ello seguir votando a Don Vito Corleone y a sus
secuaces.
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