Soy tímido para llamarle ruta, pero a pesar de ello, fueron unos 125 kms por los alrededores de nuestra urbanización. Salimos Antonio Calero y un servidor a rodar por los pueblos cercanos, parecido a lo que hice ayer, pero con ciertas variantes propuestas por el amigo Antonio.
Habíamos quedado a las 11h en la cancela de salida de la urbanización, y allí estuvimos puntuales como siempre, puntualidad inglesa o alemana, allá ellos que se peleen a ver quién de los dos, ingleses o alemanes, tienen más puntualidad.
Resumidamente, salimos por A-4 dirección hacia Córdoba, y al llegar al desvío que se encuentra a la altura del Polígono Logístico de Carmona (se identifica fácilmente porque la primera empresa que ves es DHL). Tomamos la carretera hacia Brenes, curvosa, sin arcén, maravillosa para ir en moto. Antes de llegar a Brenes, a la altura donde se encuentra la Urbanización Pradollano, viramos hacia la derecha dirección Carmona por A-462.
Cuando alcanzamos Carmona tomamos el desvío por A-457 hacia Lora del Río, pero antes de llegar a esa población nos desviamos hacia la izquierda por SE-9001 hacia Guadajoz y Los Rosales. Y por SE-3201 hacia El Viso del Alcor, volviendo a Carmona.
En Carmona, concretamente en el Polígono El Pilero, hicimos una breve paradita para estirar las piernas y desprendernos de alguna ropa de abrigo que llevábamos bajo las chaquetas. Antonio que llevaba en el baúl la chaqueta de verano, hizo el cambio de la de invierno por ésta, que es más fresca. Pasados unos minutos reemprendimos la marcha dirección a Brenes. Y en esta ocasión, por SE-3105, a la altura de la Urbanización Pradollano, condujimos dirección a A-4 y de vuelta a casa.
Entrando en materia de cómo se ha comportado la nueva moto, tengo que seguir manteniendo que bien, muy bien, respondiendo en todo momento como esperaba, sin forzar, más dura en los primeros kilómetros por lo ajustado del motor, y rodándolo con tacto, sin estirarlo demasiado, nunca haciéndolo sufrir, y soltándose poco a poco. Dándole juego a la caja de cambio y alternando diferentes ritmos y velocidades según iba pidiendo el recorrido, que tienes muchas y variadas curvas. Observé en la parada en El Pilero, que el ralentí era más bajo y estable, es como si la moto se estuviera reajustando sola. Estas motos van con mucha electrónica y supongo que su central o CPU analiza y conforme se acondicionan las piezas en movimiento hace ajustes para que todo quede en donde el fabricante ha previsto o diseñado. Me vuelvo a quedar donde estaba en el anterior escrito, solo espero que la calidad de los materiales, sin ser excepcionales, que no lo pueden ser por lo que se paga por otras marcas premium, sea la suficiente para poder hacerles kilómetros con suavidad durante muchos años... ¡Ojalá! A no ser que los precios a los que nos tienen acostumbrados las marcas europeas o japonesas, estén engordados y sus costes sean mucho menores. ¡Ya lo veremos!, porque pienso seguir informando por este medio.
Si en este momento, habiendo solo hecho algo más de doscientos kilómetros, basado en esa corta experiencia, me preguntaran si aconsejaría a alguien comprar la CF Moto 700 MT , diría que sí en mi humilde opinión. La moto es fiable, estable, muy fácil de conducir, no se aprecia el peso que tiene, el motor está duro y no puede nadie querer cogerla y que desarrolle todo su potencial en dos días, a menos que esté dispuesto a quedarse sin moto. Es cuestión de paciencia para que las tolerancias del motor sean las previstas por los ingenieros, y la moto no sufra ni se averíe. Comprendo que a alguno le resulte complicado llevar una 700, salir del concesionario y que la moto no se encuentre cómoda más allá de los sesenta o setenta kilómetros por hora, es cuestión de hacer los primero kilómetros dándole su tiempo para que adquiera temperatura, se engrase y comience el desgaste inevitable de esos elementos en movimiento dentro del motor y la caja de cambios.
El día que me la entregaron, a mí me sucedió tal como refiero, tuve la sensación de que la moto no andaba, pero lo que sí tenía super claro era que no la debía forzar, y continué como si fuera en un tractor, salvando las diferencias. Le di su tiempo y comenzó a estirarse ella sola, pero muy poco a poco, por eso se ha de tener paciencia, es una 700, pero está super apretada. Para más datos, diré que mi casa está en una urbanización en las afueras de Sevilla, por tanto debía salir a carretera y la moto no pasaba de setenta u ochenta kilómetros por hora, me arrimé a la derecha y para adelante, hasta que fue tomando temperatura y pasaban los kilómetros. Los 80 km/h, pasaban a ser 90 km/h, y en un momento, sin darme cuenta ya podía rodar a 100 km/h, por supuesto de ahí, más o menos, no le pasé, que la moto llegó a casa, el día que la recogí del concesionario, con tan solo 21 kms totales.
Seguiremos...
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