sábado, 18 de octubre de 2014

REGENERARSE




Mientras todos no pensemos en todos, mientras que no nos regeneremos, ahora que este término está tan de moda en el mundo político; no iremos a ningún lado positivo y si que marcharemos hacia el descontento y la convulsión.
Hay que hacer crecer lo mejor de cada uno de nosotros para que lo que prevalezca sea lo mejor del ser humano y no lo más decrépito. Debemos tomar conciencia de nosotros mismos, hacer ese acto de interiorización, dejar por un momento de estar solo en lo externo, para vernos y sentirnos, comprendernos, averiguar hacia donde hemos elegido ir, saber si hemos errado el destino, tomar conciencia de los demás y tomar el rumbo adecuado.
Por qué hemos de parar y hacer eso, pues porque de lo contrario ya lo vemos cada día. A diario vemos el error de la sociedad que es el error de los hombres que la componen y sobre todo o al mismo tiempo, el de aquellos que por los sistemas que se han dado en llamar democráticos, se han erigido en dirigentes de una marcha hacia ninguna parte positiva. Hemos errado el tiro y sin un cambio de nosotros seremos incapaces de modificar la trayectoria del disparo, en un símil armamentístico que tan poco me gusta; maldita sea, por qué se tuvieron que inventar las armas, por qué unos quisieron invadir a los otros, por qué unos quisieron someter a los otros, por qué el hombre no ha tenido pudor en matar a sus semejantes.
Hay que parar, hay que darse un tiempo para parar la locura, hay que echar los pies abajo de la cama, cada día, con el propósito de hacer las cosas de un modo diferente. Hay que dejar de vender falsas imágenes exteriores y hay que manejarse más con valores humanos que broten del interior de cada uno de nosotros. Hay que dejar de mentir e inventar historias engañosas y hay que ofrecer toda la verdad de las cosas, por cruda que pudiera ser. Si la verdad que se ha creado es contraria a los intereses de los humanos, habrá que cambiar, habrá que hacer las cosas de un modo diferente para que los resultados sean, también diferentes.
Tenemos una sociedad basada en valores que cotizan en bolsa y necesitamos una sociedad de valores humanos que de lugar al amor, a la solidaridad, a la amistad y al crecimiento conjunto de toda la humanidad. Entre todos se pueden abordar proyectos mayores y se avanza a un paso más ágil, además, no beneficiamos todos, como debe ser.
Saben ustedes por qué muchos leen esto y dicen que está muy bien pero que es una utopía, porque aún no están preparados para ello. Lo ven lejano, ellos mismos se distancian con sus actos, aún no se atrevieron a subir un peldaño más, se han quedado varados, no navegan por si mismos, son impulsados por la presión social, se han confundido con ella y no pueden pensar al margen de lo único que le han hecho creer que es posible. Les digo que las posibilidades son infinitas.

No hay comentarios:

Publicar un comentario

CUALQUIER DÍA ES BUENO PARA MORIR

CUALQUIER DÍA ES BUENO PARA MORIR

Mis tres primeros libros

Mis tres primeros libros

SOMOS LA LOCOMOTORA DE LA CORRUPCIÓN DE LA UE

SOMOS LA LOCOMOTORA DE LA CORRUPCIÓN DE LA UE
Volumen 1, 2 y 3

NOVELAS CORTAS DE FICCIÓN

NOVELAS CORTAS DE FICCIÓN

CRÍTICA SOCIAL-POLÍTICA 2016

CRÍTICA SOCIAL-POLÍTICA 2016

TRABAJO INTERIOR

TRABAJO INTERIOR

UN POCO DE MÍ

UN POCO DE MÍ
Críticas y soluciones