Por tradición, aunque sin ningún sentido, hoy día anterior a las elecciones es el día que nos dan a los ciudadanos para que reflexionemos y a los medios para que cierren el pico. ¿Qué hay que reflexionar que no hayamos visto ya durante la legislatura? ¿Nos queda por tomar conciencia de algún desastre más de una casta totalmente desprestigiada? ¡Ojo!, que se han desprestigiado por sí misma, no ha hecho falta más que su pésima voluntad de servir al pueblo realmente, un claro arrodillamiento ante el capital más salvaje y todo el orden plutocrático mundial, encabezado por los Estados que mirándose solo su ombligo pugnan con el resto por ser el hermano mayor, el salvador, la gran potencia en la que todos nos debamos mirar, pero han conseguido todo lo contrario, han hallado nuestra repulsa por sus argucias, por su fracaso a la hora de legislar y dirigir, oprimen, se valen del Estado para oprimir al pueblo, de los dineros públicos para enriquecerse y para desvalijarnos, y por ahí no vamos a pasar.
Uno de los culpables de que el país esté como está, y de que haya una nula independencia de poderes, así como una democracia que brilla por su ausencia se tomó, por contra, cinco días de reflexión para decir que hacía un punto y aparte. Nosotros, los ciudadanos, les vamos a replicar en las urnas, le diremos que nosotros ponemos un punto y final a su peso en Europa, y en España en cuanto tengamos la primera oportunidad para hacerlo. Replicaremos por no creer en el Estado y en todas sus Instituciones, por el fango que los que han gobernado y gobiernan vienen vertiendo en las alfombras, que solo fueron impecables el día de su estreno. Hasta aquí hemos llegado, ni un día más bajo el control de un sistema mafioso y corrupto que alberga a sus iguales para enriquecerse con el robo continuo a la ciudadanía, dejando de invertir en servicios públicos para dar nuestro dinero a entes privados y, a su vez percibir comisiones que nadie controla, y que en ningún lugar tributan, y eso lo ha hecho siempre cualquier partido gobernante, ahora también.
No nos hace falta reflexionar, sabemos los bueyes con los que aramos, conocemos las intenciones de los que están y de los que pretenden arrebatarles los sillones o meter la cabeza en alguna institución para empezar a llenarse los bolsillos de dinero público. Hoy nuestro presidente está más que nervioso, augura malos resultados, al menos resultados sorpresivos, vetan a alguien en todos los medios porque lleva años luchando contra su corrupción, la de los políticos, la de ciertos empresarios, y la de los medios de comunicación, es por ello que le tienen vetado, y como es jornada de reflexión no les nombraré. Yo prefiero a alguien que pretende seguir desmontando el chiringuito de privilegios, corrupción y latrocinio, de esos otros que hacen promesas vanas y que incumplen continuamente, o que obligan a la ciudadanía mediante decretos sacados de la manga, por su propio interés, aunque muchas veces sean anticonstitucionales. Recuerdo de cuando estudiaba geografía que decían que la Península Ibérica estaba tan poblada de árboles que una ardilla podría recorrerla de una punta a otra sin tocar tierra. A buen entendedor, pocas palabras les hacen falta.
Seguiremos...
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