LA FALSA ALEGRÍA DE RAJOY

Para Rajoy todo va muy bien, pero su ingobierno no deja de seguir imponiendo, dictatorialmente, medidas restrictivas, recortes y más recortes, barbaridades que nunca antes se habían oído; como que quieren despedir a los profesores cuando terminen los cursos y darlos de alta cuando vaya a comenzar el siguiente. Los políticos no son despedidos los días que no están obligados a acudir al parlamento o en los largos periodos de vacaciones tanto estivales como navideñas, la justicia no es igual para todos.

Todo va fabulosamente según el tipejo que nos ingobierna, pero cualquier dato laboral que parece mejorar está justificado con trabajos precarios de una hora o dos al día, de salarios que no dan ni para pagarse el transporte para acudir al trabajo o gente que desaparece de las listas del paro porque se cansan de sellar y no encontrar nada y se borran. Otros que se borran son los que se van de España y muchos de los que ya no tienen prestaciones de ningún tipo y han comprendido la inutilidad del sistema para encontrar un trabajo.

Los telediarios y las noticias de este país hablan de desahucios, de familias sin ingresos, de parados de larga duración y de otra clase bien distinta, que salta a la fama por sus casos de corrupción, que en su gran mayoría es la clase política. Sin embargo, de esto no le gusta hablar a Rajoy, porque ingobierna rodeado de mierda por todas partes. A pesar de ello, no dicta medidas restrictivas, que castiguen con contundencia a los corruptos, a los defraudores, a los evasores de capital, y en definitiva a todos aquellos que están jugando sucio. De todo esto ni habla, ni se espera que lo haga porque la mierda le salpicará. En el seno del PP se ha movido tanto dinero negro, que ha tomado tantas vías diferentes que es puro delito, por lo que no entiendo como podemos seguir ingobernados por ilegales. Elegidos en las urnas, si, pero para hacer algo distinto a lo que vienen haciendo y por supuesto no para que nos roben como lo están haciendo.

Debido a que no hay separación entre los poderes, no existe una fiscalía real, que haga la función acusadora que le corresponde, pues de lo contrario este ingobierno en pleno tenía que haber sido expulsado, juzgado y condenado, por la cantidad de delitos en los que se ha visto envuelto, los que ha cometido y los que ha silenciado o tapado. Lo que viene sucediendo en España es lamentable, la situación de catástrofe económica y laboral nos está dejando super endeudados como para no levantar cabeza en muchos años, veinte o treinta, si no quebramos por el camino. La solución no es pedir y pedir más dinero, la solución es limpiar y poner orden empezando por las instituciones, siempre hay que respetar al ciudadano primero, que es el centro mantenedor de todo el sistema. Eso es lo que tan olímpicamente se está saltando este ingobierno.