martes, 1 de diciembre de 2015

RATEROS QUE SE DEBEN A SUS INTERESES

                                          Imagen: www.fotoshumor.com


Ayer dijeron en algunas noticias que les habían reclamado los Iphones y las Tablets a los diputados, pero muchos de ellos se negaban a devolverlos, otros decían haberlos perdido, otros decían no saber donde estaban porque habían dejado de funcionar y otros decían no haberlos recibido nunca.
Es así como les preocupan a los señores diputados los dineros públicos, estos…, vamos a dejarlo ahí, se deben creer que el dinero crece en macetas y, por supuesto, lo que es una evidencia para ellos es que malgastar o derrochar les importa un bledo.
Si tú estás en una empresa y esta te hace entrega de un útil de trabajo, que no de diversión, podrá requerírtelo cuando crea oportuno, para eso es de la empresa y no tuyo. Si otros dicen haberlos perdido y la Administración se lo está solicitando, quiere decir que a ese diputado no le hacían falta los equipos que se les había suministrado. Igual, en el caso de aquellos que argumentaban no saber donde estaban porque no funcionaban, y ya no digamos el caso de poca vergüenza de los que dicen no haberlos recibido nunca, ¿no se firma el recibí de estos equipos cuando les son entregados?, cuesta creer que den los teléfonos de alta gama y las Tablets como el que está dando caramelos a los niños en la puerta de un colegio. Si es así, esto no lo hacen ni los aprendices en las empresas, esto no es serio, y habría que dudar de los controles de la Administración.
Hay también el que le dice a la Administración que se quiere quedar con el teléfono y la Tablet, pero que está conforme en que se haga una valoración de equipos de segunda mano y se le deduzca de la nómina. Al menos este diputado propone una forma de resarcir a la Administración, si esta lo ve conveniente.
Estas gentes son gentes problemáticas, porque se han creído los dueños del cortijo, y no respetan lo que es de todos. Tienen dinero para comprárselo, porque afortunadamente sus empresas no les han fallado como a otros muchos españoles, que por culpa de sus políticas si lo han hecho. Han quebrado, han despedido personal, han hecho EREs, o han tenido que cerrar. Miles de empresas se han visto en estas circunstancias gracias a la crisis bancaria, a las atenciones prioritarias hacia los banqueros, a la reforma laboral despojadora de los derechos de los obreros, y a las desigualdades creadas con los decretazos dictados por los poderosos.
Al lado de todo esto, los Iphones y las tablets son solo una mera anécdota, pero hasta en las nimiedades cuando son ellos los afectados, se revuelven y hacen presión a la Administración. Son los únicos que se pueden manifestar, quejar, presionar, hacer escraches, burlar a la justicia, amañar, delinquir, desobedecer a los jueces, pagar con dinero negro y al mismo tiempo gobernar un país, o ser la mayor banda de corruptos al servicio de sí mismos y de su partido, que no de los españoles.
Lo de los políticos españoles es una burla a la ciudadanía. Es una broma pesada y de mal gusto. Solo ellos, con sus políticas durante cuarenta años, han logrado una España con millones de personas en paro, sin ingresos muchos de ellos, sin expectativas y sin industrias. Esto sucede cuando se gobierna para los intereses de los grandes empresarios, que no quieren más fábricas porque no desean tener más competencia, y que imponen un paro estructural de varios millones de ciudadanos, para abaratar la mano de obra y empeorar las condiciones de trabajo. Cuando no se sabe hacer nada más o mejor, sencillamente, se es un político inútil y un inepto, los escaños están llenos de estos.

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