Ha sido abrir el diario digital 20 minutos y morirme de la risa. El titular dice así: Los presupuestos de 2021 ingresarán 7.000 millones con más IVA a refrescos, tasa Google y lucha contra el fraude. Al leer lo del fraude me da la risa, no puede ser más enorme la hipocresía del Gobierno, que aún mantiene oculta la famosa lista que el traidor presidente del Gobierno tanto anunció que cuando llegara a gobernar la haría pública. ¿Qué nombres contendrá dicha lista para que Pedrito reculara como quien se encuentra de frente con una mala bestia? El susto que se debió llevar tuvo que ser morrocotudo para que el frenazo con derrape incluido fuera inevitable, y su condición de traidor al pueblo se hiciera instantánea en aquel mismo momento en el que supo lo que, con tanto esmero, nos oculta al resto de los españoles. Cabría preguntarse si al saberlo tan fatídico personaje, no pasara inmediatamente a ser calificado de cómplice de los defraudadores, pues él sabe de personas que cometieron delito y los oculta no solo a la ciudadanía sino a la justicia para que actúe contra aquellos. Este punto de vista nadie lo comenta, ningún miembro de la judicatura que lo sabe, como todos nosotros y nosotras, porque Pedrito lo aireaba para echárselo en cara a M. Rajoy a cada momento, hace algo para forzar que se haga justicia. Esto tiene una única explicación para mí, está esperando a que los delitos de fraude a la hacienda pública, en definitiva al pueblo español, prescriban. De traidor a traidores… ¡un servicio prestado!
Esto es duro de tragar, hablamos de un Presidente de Gobierno que se burla del pueblo y de la justicia. Hablamos de una justicia que enmudece y se hace la loca. Hablamos de unos medios de comunicación que deciden no meter el dedo en la llaga y callan para siempre. Hablamos de una fiscalía puesta a dedo y encabezada por alguien que fue del partido, que se niega a actuar como el resto de los que soplan la gaita y aplauden los fracasos de su presidente. Hablamos, en definitiva, de un sistema corrupto, rodeado de gente corrupta, dispuesto a perdonar a 700 defraudadores que deben tener más derecho que el resto de los españoles. Hablamos de una partida de delincuente de alta clase social y bajos escrúpulos, a los que no les importa que haya menos dinero para los asuntos esenciales que interesan a todos y a todas. A pesar de esto, el Presidente del Gobierno les da cobertura como lo haría el Padrino a su clan mafioso.
Esto es España, sí ya lo sé, en todo el mundo hay corrupción e impunidad para los mangantes, pero a mí me importa el toro con el que me toca lidiar. Quisiera que no hubiera corrupción en ningún rincón del globo. Quisiera que no existieran armas ni enemigos contra los que luchar. Quisiera que todo fuera armonía, bienestar y progreso para todos los habitantes del Planeta, pero entonces vienen los plagiadores de libros y tesis, los masterizados de cajeros automáticos, las que roban cremas porque aún ganan poco como políticas, los de las empresas pantallas, los que se llevan los dineros a los paraísos fiscales, los de los EREs, los que no sintieron remordimientos de destruir el tejido industrial y productivo de España porque su sueño de grandeza era pertenecer al club europeo, aunque empeorara la vida de los de su país. Después vinieron los que siempre nos saquearon igual que los que le precedieron, y se repartían los billetes de 500 euros en sobres y cajas de puros. A todos esos mamarrachos delincuentes hemos soportado, y a todos esos que supieron aprovechar las grietas del sistema corrupto para escapar indemne con ayuda de jueces nombrados a dedo para que miraran hacia otro lado.
Si ahora vienen anunciando que van a aprovisionar una cantidad para la lucha contra el fraude, o que van a recaudar no sé qué cantidad por el mismo concepto, ya me dirán si no os da la risa. Si su deseo es luchar contra la corrupción, el fraude, es lo mismo para mí, ¿Por qué no empiezan por desempolvar la lista que Pedrito guarda tan celosamente? Digan alguna verdad en algún momento, ¡ya está bien!, no sigan engañando al pueblo, sean serios, ¡váyanse a sus casas, miserables!
No hay comentarios:
Publicar un comentario