Mientras no cambien las leyes y
siempre que las apliquen como lo hacen, es imposible que los delincuentes
políticos le tengan respeto a lo que es de todo, a la ciudadanía, a lo que deben
significar las Instituciones, al país, etc. ¿Van a cambiar las leyes y van a
dejar en libertad a los jueces y fiscales para que caiga todo el peso de la ley
contra los infractores, los corruptos y corruptores? Cuesta mucho imaginárselo,
hay que hacer un verdadero ejercicio de enmienda y regeneración, al que nuestros
políticos no están ni acostumbrados ni disciplinados, ni están dispuestos.
¿Cómo van a legislar en su contra, en contra de sus intereses, ventajas y
privilegios?, ¿alguien se lo puede creer?
Los más destacados metedores de
patas, los descarados, los que ya viven la ilegalidad como una parte añadida de
sus vidas cotidianas y, casi les da lo mismo exhibirlas con total impunidad, a
sabiendas que el sistema y sus amigos les protegen; esos, van a la cárcel a
cumplir penas de risas o retenciones momentáneas, mientras sus compinches hacen
desaparecer cuantas más pruebas mejor.
No entregan a tiempo los documentos requeridos por los jueces que instruyen,
rompen los discos duros que contienen información primordial y acusante,
reprueban a los jueces que ponen los dedos en la llaga con peligro de
derribarles; a esos magistrados los inhabilitan para el resto de su vida
judicial, ejemplos: El juez Garzón que puso de manifiesto la gran trama Gürtel,
o el juez Elpidio que estaba destapando todo lo de Caja Madrid, Bankia, la
falsa salida a bolsa y como consecuencia de esta otra parte de la trama: las
tarjetas blacks. El que acierta en la diana va a la cola del paro. Hemos visto
como son expedientados buenos funcionarios que se han atrevido a aportar datos
que involucran en asuntos delictivos, indecorosos y poco éticos a políticos de
este país, ¿saben qué les han hecho los políticos en el poder?... amargarles la
vida, hacerles pasar por un calvario y ponerles en la calle… quedan enfermos y
en paro. Deben ser los únicos funcionarios que se expedientan en este país,
donde se castigan a los que acusan a los corruptos y corruptores, nunca a los
malos trabajadores si son de su palo… agachan la cabeza y se tragan la piedra
de molino.
Esto es lo que hay, qué podemos esperar
de quienes no hacen sesiones de pleno, una detrás de otra, para hablar de todo
esto y construir la forma de terminar con ello. Las sesiones son chirigotas,
acusaciones, risas, abucheos y mucha palma; cada grupo aplaude a los suyos y el
toro nadie lo coge por los cuernos. El otro día la señora Presidenta: Ana
Pastor tuvo que avisar al personal de que el hemiciclo no era un circo; lo
advirtió porque es lo que parece, pero no solo aquel día… sino casi siempre. El
decoro al que se refiere entre otros la Presidenta de la Cámara, ¿es acaso el
de mostrar respaldo a los delincuentes de su partido? Nos ha quedado
transparente como el agua que el circo es el escenario infernal, en el que la
gente del PP ha convertido este país… no se pueden rebasar más límites en menos
tiempo. Muchos del PP tienen a sus espaldas el haber cometido casi todos los
delitos contenidos en nuestro código penal; hacen falta las leyes que condenen
en la proporción de las infracciones cometidas. Esta es labor de los políticos,
así que por favor no mareen más la perdiz, pónganse manos a la obra.
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