NAVIDAD

Hoy es Navidad, se celebra que el niño Jesús hubiera nacido, según nuestro calendario hace 2013 años, pero seguimos teniendo un día de vacaciones por tal motivo, esto es como la película del día de la marmota, parecemos atrapados en un día que se repite, en lugar de cada día es cada año. Esta sociedad española, aconfesional o laica, yo ya no se definirla porque la verdad es que hablan de una y otra, no se distancia de las imposiciones de la alta curia religiosa. La Iglesia ha de estar presente hasta en la sopa, y de algún modo condiciona a los Gobiernos, adoctrina a los ciudadanos, y consigue privilegios para sí.

Navidad, dulce Navidad, campaña de ventas excepcional para las empresas especializadas en los dulces navideños: turrones, alfajores, mantecados, peladillas, mazapanes, etc., y también es un buen momento de negocio para las empresas que destilan o producen bebidas propias de estas fechas: anises, ponches, coñacs, sidras y champañas.

La Navidad también despierta la industria juguetera, es una fecha que da el pistoletazo de inicio de las compras de juguetes, tanto para la noche de ayer, Papa Noé, como para el próximo día cinco de Enero, día de los Reyes Magos. Ambos inventos comerciales y de ilusión de los más pequeños, son excusa más que suficiente para que en muchas casas se tire de la tarjeta con mayor facilidad, que el resto del año.

Hay otro aspecto menos dulce de la Navidad, que es la falta de parte de la familia, ya no vendrán más a reunirse con el resto de la familia aquellos que se fueron de este espacio-tiempo, y muy doloroso para algunos no disfrutar de aquellos otros de la familia que, por discrepancias o antiguos malentendidos, se encuentran distanciados. A su vez, la Navidad siempre ha sido una fecha en la que se han reconciliado muchas posturas enfrentadas, en la que se han hecho las paces, en la que se han normalizado aquellas discrepancias a las que antes me refería, esto sucede siempre que las dos partes lo quieran y hayan encontrado su momento para reconsiderar sus actitudes.

De cualquier manera podemos interpretar la Navidad como una excusa para reunirnos, vernos, abrazarnos y charlar, podríamos decir que es tierra neutral, espacio de nadie y de todos al mismo tiempo y que si no fuera por la limitación del espacio, del dinero y del esfuerzo, sería un magnifico día para reunirse con toda la humanidad, comer con toda la humanidad, abrazar a todos las personas del planeta, intercambiar conocimientos pero sobre todo sentimientos para reír todos juntos o llorar todos juntos, pero claro esto es un sueño, es sencillamente o materialmente imposible de llevar a cabo. Recordemos al resto de los habitantes de la Tierra, tomemos un poco de conciencia de los demás, hagamos un huequito en el corazón donde seamos capaces de acogerles, sentémonos aunque solo sean unos minutos y dediquemos una reflexión donde el centro de atención sean los demás pobladores no nosotros.

¡Que el espíritu de unión familiar alcance a la totalidad de la población mundial, que las miserias y desequilibrios del comportamiento depravado de algunos grupos de personas lleguen a su fin, que la vida de cualquier poblador de este planeta sea digna en cuanto a tener lo necesario y básico para vivir libre del hambre y con los medios para atajar las enfermedades, que los recursos más imprescindibles para poder subsistir estén al alcance de todos los habitantes de la Tierra! FELIZ NAVIDAD PARA TODO EL MUNDO.