sábado, 14 de diciembre de 2013

RABIA CIUDADANA


Hablan de políticas emprendedoras pero no dan facilidades a los que se lanzan a las arenas del circo empresarial, hablan de que hay que trabajar más y ganar menos, y lo dicen aquellos que arruinan empresas como el anterior presidente de la CEOE, Díaz Ferrán, sin Sr., que lo dejo para otras personas que hayan demostrado mayor honorabilidad. Otro que iba en el mismo sentido, apuntando además que se tenían que lograr despidos económicos, como así ha sido, era el anterior gobernador del banco de España, Fernández Ordoñez, otro miserable que incumplió su cometido de vigilar y haber evitado el espantoso descalabro de bancos, cajas de ahorros y las insultantes jubilaciones anticipadas de sus directivos tras hundir las entidades en las que trabajaban.
El mundo entero debería de estar al día de los saqueos que han venido sucediendo en España, de cómo son consentidos por la justicia que se encuentra privada de independencia, como si dijéramos se encuentra secuestrada por los partidos políticos mayoritarios, así como de la impunidad en todos los sentidos, aspectos, ministerios, cargos, parlamentos autonómicos, etc.; es como si estuviera hablando de una cesta de manzanas endemoniadamente podridas, llenas de gusanos que tienen nombres y apellidos, protegidos por un sistema blindado y hecho a medida de la delincuencia y corrupción de las altas esferas.
La impotencia con la que los ciudadanos honestos vivimos estas situaciones es de una magnitud, que comienza a rebosar el vaso y a producir una rabia contra el sistema y los manipuladores del mismo, que produce hasta en las mentes más cautas pensamientos bastante destructores o negativos. Mentiría si no dijera que he llegado a pensar que seguramente este gobierno echa de menos las movidas terroristas, que de ninguna forma deseo que vuelvan, pero es que parece que se aburren sin la desestabilización externa, y por eso están legislando de este modo tan insultante para los ciudadanos. Están tensando tanto la cuerda que llegará el día en que se rompa, empezarán las revueltas, los atentados, y empezaremos a lamentarnos, pero lo que no tendremos duda es de quienes habrán sido los responsables, precisamente los irresponsables que nos gobiernan.
No se puede hacer peor: cargarse la sanidad, la educación, las condiciones laborales, empobrecer a la población con una deuda pública equivalente al 100% del PIB, tener molestos y empobrecidos a casi el total de los mortales, pero no contento con ello pretenden sacar la ley de la mordaza, llamada de seguridad ciudadana, cuando quisieron decir de protección y seguridad de los políticos; no permitiendo que los ciudadanos protestemos contra los desaguisados y la mafia política, atemorizándonos con multas que ninguno seremos capaces de pagar, qué quieren quedarse con nuestras propiedades, no porque con su burbuja inmobiliaria, con la que se pusieron las botas los políticos y sus amigos ya tienen viviendas de sobra, que se las metan por donde les quepan, sino que lo que pretenden es el silencio a sus actos delictivos, abusivos o represivos, esa es la España que quieren, la de borreguitos contribuyentes, que ya ellos se lo gastarán como mejor vean y que les pueda asegurar sus futuros con empleos como nos tienen acostumbrados en las grandes compañías, que antes fueron nacionales pero que privatizaron tras mentir a los ciudadanos, convirtiéndose en sus zonas de retirada de la política, con salarios escandalosos.

Saben lo que hacen, lo malo es que lo hacen a costa de nosotros y desmantelando nuestros bienes. Esto no se arregla en las urnas por mucho que se esfuercen en decirlo.

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