Parece mentira
que alguien como el Sr. Rato, que ha sido Ministro de Hacienda y Director
General del FMI, lleve acosado por la justicia varios meses, por cometer
delitos fiscales, posible blanqueo de dinero y probablemente alzamiento de
bienes. Es un ejemplo más de la vocación de servicio al ciudadano que tienen
toda esta banda de delincuentes. Son verdaderos profesionales de la estafa
junto con sus compañeros de partido que están pringados en la Gurtel o la Púnica,
amén de Caja Madrid, Bankia, etc.
El actual
Ministro de justicia, el Sr. Catalá, dice que el PP puede estar tranquilo y
para decir eso con todo lo que les está lloviendo, es que han debido de
arreglar algo con los jueces o les habrán leído la cartilla en algún sentido.
Por eso, debe hablar en esos términos el Ministro del partido que ha quedado
probado por el juez que ha tenido contabilidad “B”, que sus altos cargos han
cobrado sobres en negro y que ha pagado la reforma de su sede con dinero negro.
Es el mismo partido que se ha llevado más de veinte años cobrando comisiones a
las que llama colaboraciones o donaciones de empresarios de la construcción,
que se vieron beneficiados con adjudicaciones millonarias. También es el mismo
partido que destruyó los discos duros de los ordenadores de Bárcenas, algo no
debía de estar muy en regla en los mismos. Y sigue siendo el partido al que el
juez tuvo que ordenar hacer un registro de su sede para incautar documentación
que pidió al PP en diversas ocasiones, sin que fueran atendidas dichas
peticiones.
Ahora ya
estamos en condiciones de decir que el Sr. Catalá ha tratado de defender lo
indefendible. Y que defiende a una madriguera de sinvergüenzas y malhechores,
porque no se les puede llamar de otra manera. No solo delinquen como hemos
podido ver en este corto relato de algunos hechos, sino que además tienen la chulería
de desatender al juez, o sea de cometer desacato a la autoridad. Algo común en
los miembros de ese partido, Esperanza Aguirre lo hizo en su incidente del
estacionamiento en medio de la Gran Vía de Madrid, mientras sacaba dinero de un
cajero. No pudo ir veinte o cincuenta metros más lejos y buscar un aparcamiento
libre como debemos hacer cualquier ciudadano. Una vez más demuestran que ellos
se sienten por encima de la ley, del bien y del mal, etc.
Ya para
rematar la faena del cinismo, del descaro y de la dictadura a la que nos somete
este PP, van a aprovechar su mayoría absoluta, para modificar la ley electoral
a pocas fechas de la próxima cita electoral.
Todo ello, por el fracaso electoral del 24 M, en el que han perdido una
innumerable cantidad de mayorías absolutas y después de que la coalición de
otras fuerzas políticas le arrebataran las alcaldías de casi todos los
municipios de España. Ahora para el PP una mayoría suficiente para Gobernar es
la que alcance el 35%. Han modificado las reglas aritméticas y ahora la mayoría
ha pasado del 51% al 35%, son unos cracks. Habrá que corregir los libros de
textos porque los chavales van a sentirse desconcertados.
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