Rato se
entrevista con el Ministro de Interior, ¿cómo debemos entender este
acontecimiento? Del Ministro dependen los cuerpos de seguridad que están
investigando a Rato, ¿es ético y prudente que el Ministro se reúna con el
presunto delincuente?, ¿habrá ido a meterle las cabras en el corral, al
Ministro?, ¿le habrá amenazado o avisado de que si siguen investigando pueden descubrir
información contra el PP? o, tal vez, le haya advertido, como hacen casi todos,
de tener pruebas que podría usar si no le dejan tranquilo. Esto ya como último
recurso para librarse de los posibles cargos o delitos que se les pudieran
imputar.
Otros dicen
que es posible que trataran sobre la seguridad de Rato, por haber sido un alto
cargo del Gobierno. Sin embargo, está la información revelada por los
periodistas, que han llamado al Ministerio de Interior para que les dijeran el
motivo de la visita de Rato y, la respuesta que han obtenido es que no se puede
decir nada, que es secreta. Ante todo este oscurantismo, los partidos de la
oposición, han pedido la comparecencia del Ministro en el Congreso para que de
explicaciones.
Una vez más,
se pone de manifiesto la falta de transparencia de un “ingobierno”, que
constantemente hace lo contrario de lo que dice que va a hacer. Mucho hablar de
transparencia, pero a la hora de la verdad, nada de nada. Es chocante que el
Ministro se reúna con alguien que las fuerzas de seguridad, que están bajo su
mando, están investigando. Y si la reunión es obligada debería haberse
celebrado ante toda la plana del Gobierno para que no se puedan “cocer habas”,
ni se hable de nada que no se deba hablar y sobre todo para que haya testigos,
pues la situación es un poco delicada en el momento actual del caso Rato.
Por otro lado,
y puesto que el PP está bajo la lupa de la sospecha por estar envuelto en
cantidad de casos de corrupción; de inmediato, el Presidente, Sr. Rajoy,
debería haber pedido explicaciones o llamado la atención a su Ministro por
haber accedido a reunirse con una persona imputada e investigada por las
unidades anticorrupción y de fraude fiscal de los cuerpos de seguridad, que
están bajo su mando.
Hay voces en
los medios que incluso piden la dimisión del Ministro, aunque esto quizá es ir
demasiado lejos. Primero se tendrían que conocer los pormenores de la reunión y
si dichas unidades de la policía, a raíz de la reunión, reciben alguna orden
del Ministro en un sentido u otro.
Tuvieran que
tratar lo que tuvieran que tratar, hubiera sido mucho más ético esperar a que
concluyeran las investigaciones y que el juez tuviera toda la información de
los citados cuerpos de seguridad. O, como dije antes, si no había más remedio
que celebrar dicha reunión, que se hubiera hecho bajo los focos de cuantas más
personas del Gobierno mejor. Así se tiene la tranquilidad de que no se pactan
historias raras.
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