Ayer Felipe González dijo en una
entrevista que lo de los EREs es un descuido generalizado. Felipe González nos
debería explicar qué es un descuido generalizado para él, porque si la
Administración se despista al completo hay que pensar si allí alguien valía
para algo más que para llevarse el sueldo y los dineros que desaparecieron. Lo
que más me maravilla es el descaro con el que los políticos sueltan algo
parecido a lo que dijo, y lo fresco que se queda… además, se lo debe creer y
todo. Incluso, es posible que piense que los que le escuchamos nos lo hayamos
creído, como siempre hablan como si fuéramos idiotas. Lo que sí sabemos es que
todos los que nos han gobernados han sido y son unos indecentes, en esto sí
estamos en disposición de afirmarlo, todos nos han robado, todos han
malversado, todos han favorecido a sus partidos, a sus amigos y familiares. El
nepotismo, el enchufe para que se entienda, la dedocracia como gusta expresarlo
a otros, ha estado a la orden del día, tal como los dineros o subvenciones
dadas a familiares. Esto sí que lo sabemos, y que todos los que nos han
gobernado han hecho negocios con empresarios, han privatizado y empobrecido a
la población, o que todos han pagado sobreprecios en todas y cada una de las
adjudicaciones concedidas a los empresarios donantes de sus partidos. Esto sí
sabemos que ha sido y es la práctica habitual de financiarse ilegalmente, ¿no,
Felipe?, ¿recuerda Filesa?
Salió de la nada, luchó como si
fuera un auténtico político de izquierdas, ilusionó, pero, como casi ninguno,
no aguantó o soportó la presión del empresariado y los banqueros… claudicó,
como hacen todos… los dineros son muy malos, la avaricia es peor. Siendo
socialista, supo robar al pueblo y regalar dinero a los bancos, tal como hoy se
ha seguido haciendo. De lo contrario, no hay condonaciones de deudas del
partido, por lo tanto acatan órdenes y de ese modo, empresarios y banqueros
gobiernan en España sin haber pasado por ninguna lista electoral ni ser
votados.
Para los creyentes de Felipe
González, yo fui en mi juventud uno de ellos hasta que me descorazoné con los
políticos y dejé de votar durante muchos años, lean el Informe Petras, búsquenlo
en Internet, comprendan lo que supuso la integración en Europa de España en
tiempos de Felipe González, los recortes empresariales, los topes que nos
impusieron en la producción agrícola, industrial, ganadera, pesquera, etc. Los
camiones de productos españoles que nos volcaban en la frontera francesa, las pérdidas para
los diversos sectores que aquella decisión del Gobierno de Felipe González nos
supuso. Habría que haberle dicho: Europeos sí, pero no a cualquier precio. Pero
Felipe se arrodilló para trepar en importancia, adhiriendo España a Europa y a la
OTAN, pagando un alto precio. Son traiciones bien vistas desde el mundo oscuro
de las negociaciones políticas, pero sin contar con la ciudadanía y sin haber
procurado el bien de la misma por encima de todo. Cuando firma PSOE con PP el famoso
art. 135 de la Constitución para asegurar el pago de la deuda a entidades
bancarias extranjeras, incluso, por delante de los pagos o gastos que se
ocasionen en servicios públicos, ¿es eso mirar por los intereses de la gente o
de los bancos amigos?... evidentemente, es para dar tranquilidad a los bancos
amigos de que van a cobrar. Según Felipe, y siguiendo con el hilo de su carrete
u ovillo, todo lo que ha sucedido en España que ha empañado la gestión política
y ha perjudicado a los españoles y españolas, han de ser descuidos
generalizados, en ese caso de los Gobiernos, incluido el suyo.
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