Hace unos días se dio una buena
noticia, pero como no es política, ni morbosa, sino una buena noticia para la
humanidad, no se ha repetido como se repite la de un político que ha conseguido
un master sin haberlo cursado, o la de un rey que nos ha robado pero se niegan
a investigarlo, por lo tanto, mucho menos a juzgarlo o condenarlo. Hace unos
días un equipo de investigadores españoles, a pesar de los recortes en
investigación, cumpliendo con su oficio, no como los señores políticos que se
encuentran alejados de la ciudadanía y reñidos con el sentido común,
encontraron un nanofármaco, ya probado con animales, que evita la creación de metástasis
cuando ha habido un cáncer de colón, pero prevén que pudiera ser efectivo,
también, en otros muchos tipos de cáncer para evitar que se extienda por otras
partes del cuerpo. Precisamente, las metástasis son la causa principal de que
el mal no tenga remedio, es esa invasión de otros órganos la que
inevitablemente nos conduce a morir, pues bien, ese grupo de investigadores ha
logrado un medicamente, que como ellos dicen, actúa como si de un dron se
tratase, localizando las células responsables de la diseminación de la enfermedad
por el cuerpo, eliminando dichas células de una manera selectiva sin dañar al
resto de las células buenas. Con ello evitan una mayor toxicidad en el cuerpo
del enfermo y, por supuesto, la cantidad de reacciones adversas que provocan
los medicamentos actuales contra el cáncer.
Esta noticia es tan importante
que es como para que abra durante varios días todos los informativos del país,
pero debe ser que vende poco. Por ejemplo: una riada en alguna población del
este del país, con la señora agarrada durante dos horas a la reja de una
ventana, que todos hemos podido ver estos últimos días, esas imágenes las pasan
una y otra vez, en los informativos del mediodía y de la noche. El piso que
ardió en el que murió una persona, y otra del piso de encima al del incendio,
embarazada de siete meses, se arrojó desde su ventana del tercer piso al patio
interior; esta noticia también la pasan una y otra vez. Si hubiera sido un
autobús que vuelca y mueren varias personas, lo mismo. Si hubiera sido un coche
con alguien bebido o drogado que se lleva por delante a un grupo de ciclistas,
otro tanto. Lo negativo lo recrean bien, no llego a entender el objetivo o la
funcionalidad de hacerlo. Los medios reparten lo feo, lo que estremece, es el
periodismo de la negatividad, del miedo. Todo lo que queda de las noticias, es
el acuchillamiento de alguien, los dos tiros, el ajuste de cuentas, los
accidentes, los desbordamientos de ríos, la gente ahogada, y la de
desestabilización del país: las huelgas, las protestas, la precariedad laboral
y, por contraposición, los grandes eventos deportivos, festivos, etc., no
busquen más, no hay más contenido, al menos no en el grueso de las noticias. Me
vuelvo a preguntar qué es lo que pretenden los que seleccionan las noticias,… o
tragedia o el mundo de la élite inalcanzable para el conjunto de la sociedad.
En muchas ocasiones he criticado
a los medios, y no tengo más remedio que hacerlo una vez más. En una semana
solo una noticia tan maravillosa como esta de este grupo de investigadores,
estoy seguro que en el mundo han ocurrido cientos de cosas positivas, buenas,
que signifiquen progreso, esperanza, futuro, pero no conviene dejar de
preocupar a la población, no vaya a ser que la euforia sea contraproducente con
el “agachamiento” de cabeza necesario para que se sienta subordinada al sistema
y al poder impuesto por la minoría gobernante que, a su vez, no son más que
marionetas de los que realmente mandan y de los que tampoco se atreven a hablar
los medios en ningún momento.
Analicemos lo siguiente: Se quema
un piso, muere una señora mayor que vivía en él y su vecina de arriba se arroja
al vacío. ¿Qué aporta el relato de este suceso, me lo quieren decir? Es una
noticia que no tiene nada de interés salvo para los familiares de esas
personas. Pero la noticia del descubrimiento de los investigadores españoles es
un beneficio para toda la humanidad, es grandiosa e incomparable con la mayoría
de relatos que hacen los medios. Los medios colaboran para que sigamos
atontados, que es como desean que estemos, así el poder nos maneja mejor. Los
medios son potentes aleccionadores de la población al servicio de los
poderosos, por ser estos sus dueños, los mismos poderosos que mueven los hilos
del plantel de marionetas en que se convierten los supuestos políticos elegidos
por la ciudadanía.
Habría que romper el sistema, la
Constitución y fundar algo nuevo y diferente, en el que las personas voluntarias
a conformarlo tuvieran que pasar el detector de mentiras, el arco de seguridad,
los escáneres y juraran desear trabajar para el bien de la ciudadanía y tenerle
lealtad solo a la ciudadanía, que es el único poder real, los demás son ficticios
y han sido usurpados e impuestos a la gente.
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