Imagen: www.publico.es
Este podríamos
decir que es el curso escolar del coronavirus, en el que hizo incidencia y el
alumnado tuvo que dejar de asistir a colegios, Institutos y Universidades. Las
autoridades se encuentran en la encrucijada de cómo finalizar este curso
tratando de hacer el menor daño al alumnado, pero la solución que algunos piden…
el aprobado general, no creo que sea lo más adecuado. Cada decisión que se tome
no nos puede acercar a la chapuza y a una sociedad de mediocres, debemos ser
responsables y comprender que si el curso se quedó a falta del último
trimestre, ese trimestre hay que repetirlo y la mejor forma a mi entender es
volver a repetir el curso sin hacer exámenes hasta el último trimestre. Debe
ser un curso para que el alumnado recuerde y afiance conceptos dados hasta
llegar a la materia que no se pudo dar en clase de manera presencial, y es ahí
donde el alumnado deba examinarse.
Esto es algo atípico,
pero también lo es que la gente se quede en casa y no vaya a trabajar o, que no
podamos salir a la calle a pasear, a los bares a tomar algo, al cine o a un
campo de fútbol. Ante males mayores hay que adaptar las medidas y las
costumbres o rutinas, por eso creo que repetir el curso no hace mal a nadie. No
hay que mirar este curso como un desastre insalvable, ni se hunde la Tierra, ni
estamos corriendo un peligro de muerte por volver a hacer un curso de repaso y
refuerzo de las asignaturas vistas en clase. Es todo lo contrario, tras el
repaso de la materia escolar de cada curso, el alumnado debiera llegar en
mejores condiciones al último trimestre para examinarse, la base será más
estable.
Por qué hablo
desde este punto vista, pues porque he escuchado en radio que no todos los
alumnos están pudiendo asistir a las clases virtuales por falta de conexión a
internet en sus hogares, o por no tener dispositivos apropiados para seguir
dichas clases impartidas online por su profesorado. Igual se debiera haber
dedicado las cadenas de televisión local a la emisión de contenido escolar de
los diferentes niveles y materias, algo muy complejo para cubrir la cantidad de
materias educativas que se tendrían que emitir, quizás, no hubiera tiempo
físico para darlas en el día, además no serviría para evaluar al alumnado, tan
solo para que refresquen contenidos y no se desconecten del todo de los estudios,
del aprendizaje.
Insisto, creo
que lo más sensato y más beneficioso para todos es repetir curso con la
peculiaridad expresada de no realizar exámenes hasta el último trimestre, que
es el que realmente se ha perdido. Sí habría una marcha normal de clase, con
tareas que los alumnos y alumnas deben llevar hechas para que su no
colaboración no comprometa las notas que posteriormente obtendrán con los exámenes
de la última evaluación.
Repetir curso
en estas circunstancias no debe ser visto como un fracaso de nadie, ni del
sistema educativo ni del alumnado, siempre se recordará la fecha y el motivo
que propició la repetición. Servirá, como dije, de refuerzo, tan solo los malos
estudiantes tienen la suerte de poder recibir clases sobre algo que debieran
saber, al menos todo debiera sonarles, no hay que tomarlo como algo negativo.
En este caso nadie repetirá por no haber estudiado ni por haber cateado
asignaturas, todos repetirán para llegar a ser mejores estudiantes sin que les
falte base en ninguna de las asignaturas, algo que sí sucedería dando ese
aprobado general injusto. Medidas así, como creo haber oído, concederá el
Gobierno italiano, no favorece a nadie, sino que motiva y fomenta la mediocridad
en las aulas, lo cual conlleva a futuros profesionales de escaso nivel. No es
acertado regalar ante la dificultad, sino formar para que la gente sea capaz de
resolver mentalmente los problemas y encontrar salidas satisfactorias.
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