El error que cometo siempre
cuando pienso en la sociedad es que doy por cierto que vamos a tener unos
gobernantes que van a partirse el lomo por conseguir el bienestar y el progreso
para que todos salgamos ganando de algún modo, y eso no es así. Siempre me
sucede lo mismo, idealizo contando que eso será así, porque en mi mente es lo
normal, es la función que se le presupone a esos señores que llegan a lo alto,
bueno, por llamarlo de algún modo, pues ya vemos lo bien bajo que caen la
mayoría de ellos.
Digo todo, porque estoy pensando
de nuevo en la coordinación tan necesaria que debiera existir entre estudiantes
que finalizan estudios y los puestos de trabajo que se deberían ir creando para
esas personas. Esto no se contempla, ningún Gobierno que haya tenido España ha
estado o está preocupado por encontrar una solución a este problema, mejor
ponen de moda términos como: movilidad exterior, tal como hizo la Ministra
Bañez. La Ministra dijo eso inconscientemente, sin reflexionar sobre el alto
coste de la formación de esos jóvenes para las arcas del Estado, que es el
dinero de todos los españoles. Pero no sucede nada, cómo va esta nimiedad a
afectar al seno de un Gobierno corrupto, que ha hecho todo lo que estos últimos
años nos ha hecho a todos.
Estas gentes no se enteran de
nada de lo que hay que enterarse para conseguir ese bienestar social y ese tan
necesario progreso, que hay que lograrlo invirtiendo en formación e
investigación, industrializando el país y dejando de robar. Pero esto no
quieren comprenderlo porque ellos están en otra cosa… llevarse la pasta por la
cara, vender empresas públicas rentables, privatizando servicios públicos,
moviendo dinero en paraísos fiscales, montando empresas pantallas, manejando
dinero negro… ¡el Gobierno estafando a Hacienda!, ¡eso cuando se ha visto!
Además, tiene secuestrada la justicia, lo que les proporciona casi total
impunidad a los ladrones que ocupan o hayan ocupado altos cargos políticos, y
cuando no tienen más remedio que salir, entre ellos, se buscan empleo en
direcciones de bancos, en consejos de administraciones de grandes corporaciones
o en embajadas. Ellos premian a los chorizos que hayan puesto la cabeza para
ocultar las transacciones sucias e ilegales de su partido o del Gobierno. La
gente está tan enferma, que viendo todo esto, sigue en el juego de votarles… la
gente está realmente mal.
Volvamos al tema que nos incumbe:
la necesaria coordinación entre estudiantes que finalizan y la creación de
puestos de trabajo para ellos. Si la sociedad sostiene un Gobierno ha de ser
con las reglas que impongan los ciudadanos y ciudadanas de este país y, lógicamente,
se corre con unos gastos para obtener unos servicios de calidad, tener
excelentes infraestructuras y debería incluir entre sus compromisos, una
organización del trabajo donde tuviera cabida esa coordinación de creación de
puestos de trabajo para los estudiantes que finalizan sus estudios. No digo que
haya que crear el cien por cien de los empleos porque habrán los que estudiaron
para ser profesionales libres, pero lo que vengo a decir es que el empleo ha de
ser un asunto a resolver por el Gobierno, aunque éste se lo sacuda de encima y
lo cargue en los hombros de sus amigos los empresarios, los cuales nunca
terminarán con el desempleo. A ellos les va bien así, un excedente de personas
paradas les facilita pagar salarios bajos y empeorar las condiciones de trabajo:
temporalidad, abusos horarios y explotación en pocas palabras. ¿Qué dice el
Gobierno de todo esto, se pronuncian en algún sentido?, ¿cómo vamos a pedirle
responsabilidades a unos irresponsables?
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