domingo, 6 de agosto de 2017

VIVIMOS LA SOCIEDAD EN LA QUE CADA CUAL EMPUJA EN UNA DIRECCIÓN




Es curioso que en cuanto el Parlamento Balear ha dado un paso adelante para no permitir hacer daño a los toros en la corridas, muchas otras localidades gobernadas por el PP, justo en estos momentos, han comenzado a hacer propaganda de algún curso de tauromaquia para jóvenes, incluso hay una región, no recuerdo si es la murciana que va a incluir en el plan de estudios de formación profesional, un ciclo especializado en sacar toreros. Esto demuestra que estamos en una constante revancha, en un tira y afloja de los unos contra los otros, sin importar las repercusiones, el daño que se haga o si es necesaria tal profesión para los intereses generales del país y de la población. Esto huele al señorito de toda la vida, que se niega a que le toquen su divertimiento: la tarde de copa, puro y corrida de toros, el griterío, los aplausos y la celebración de que el torero ha asesinado a un animal de una sola estocada. No importa qué vino a hacer al mundo ese animal, no importan los aspectos religiosos de la gente, la hipocresía de la creencia que por la mañana va a misa a darse golpes de pecho y por la tarde acude a ver como asesinan a un inocente animal, que nada o poco tiene que ver con ese marco de festejo-tradición y tortura que va a acabar con una vida, ¿el Dios de esa gente lo ve con buenos ojos, permite el castigo, la saña y el asesinato de ese ser vivo?
No se pueden justificar las tradiciones porque comenzaron en otros niveles de cultura y civismo, quiero entender y, supongo, que hemos avanzado o deberíamos haberlo hecho, ahora deberíamos ser menos animales, con perdón, y más humanos, aunque algunos están erre que erre con la crueldad manifiesta que representan ciertas tradiciones. La mente del ser humano evoluciona con el paso del tiempo, la conciencia también, ya no somos los de hace trescientos o quinientos años, no nos mueven los mismos objetivos, no vivimos de igual forma, nuestras viviendas no son iguales que las de antaño, los niveles de educación, servicios, etc., deben haber cambiado mucho, ¿no creen? Por tanto, al no vivir del mismo modo, nuestras exigencias son diferentes, no somos las mismas personas ni nos mueven las mismas prioridades, ¿por qué no se han perdido las tradiciones o algunas de ellas? Yo llego, como he dicho en muchas ocasiones, a que se respete el toreo como arte de capote, juego y pases entre torero y toro, pero una vez decida el torero o se vea demasiado cansado al toro, que se le devuelva al corral y a seguir disfrutando del campo… en mi cabeza no cabe otra salida a este embrollo y discusión. Toreo sí, para aquellos que les gusta ese arte, esa danza con el toro, pero daño al toro, cero.
Volviendo a lo que están haciendo algunas comunidades del PP, enseñen a los que quieran aprender la estilización de esa danza, de ese arte, que llaman toreo, pero inculquen en los chavales los valores humanos que nos deben diferenciar de los depredadores, de los asesinos, de la gente que fríamente quita la vida a seres inocentes. Los toros son organismos como los nuestros, con pulmones, corazón, cerebro, aparato circulatorio, excretor, digestivo, etc. Terminaciones nerviosas, sufren con el dolor, se desangran y mueren, ¿se imaginan ustedes atravesados por una espada de acero, qué se debe sentir? Mientras se desangran internamente, los órganos van fallando, se va ahogando, vomita sangre que inunda su cuerpo, sus pulmones y mueren… eso es lo que le sucede al toro, ¿eso es motivo de fiesta y diversión?, ¿lo ven ustedes como una normalidad? Y no solo le está ocurriendo al toro, esto sucede cada día en los millones de mataderos o centros de sacrificios de animales diseminados por todo el Planeta… están asesinando animales vivos de formas muy crueles para mantener, como siempre, a una industria muy poderosa: la de la alimentación. ¡Pobres animales!, desamparados de cualquier ley que les proteja, todos los políticos y autoridades miran hacia otro lado, mientras el grito sordo de millones de animales colgados de una de sus patas, rajados en vivo, dejando escapar su vida por la escisión realizada sin miramiento alguno ni cuidado y tan solo con el objetivo de alcanzar alguna de las arterias principales del animal con el fin de que vierta toda su sangre lo más rápidamente posible y muera cuanto antes… ¡esto es inhumano! No me valen los argumentos de los que dicen que los animales se crían para eso o que si no, no existirían, o qué íbamos a comer si no. Comprendo que cuando todos los días nos ponen en televisión tantos desastres donde perecen personas, hay muchos que tienen hecho el cuerpo y pueda resultarles una nimiedad que se quite la vida a los animales. A pesar de ello, debemos rebelarnos contra los crímenes masivos de seres vivos inocentes y totalmente ajenos a que su destino sea ser comidos, y tendríamos que exigir más a nuestras autoridades para que se investigara sobre una dieta completa, que no reporte peligro alguno y en la que se evite quitar la vida a los animales… empecemos por esto y ya veremos cómo se puede seguir.

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