Hoy va de la
declaración de la renta, de por qué no la hace directamente Hacienda y sin embargo
nos tiene que molestar. Ese es el punto número uno, puesto que manejan toda
nuestra información fiscal, bancaria, salarial y patrimonio, por qué no hacen
nuestras declaraciones y nos pasan los resultados para que los verifiquemos, y
si estamos de acuerdo paguemos o nos abonen la cantidad correspondiente.
Otro tema
relacionado con la declaración de la renta, tal como está establecida
actualmente, es que puedes consultar y modificar tu borrador, que se parecería
a lo expuesto en el anterior párrafo pero con la salvedad de que nunca te
resulta tan favorable como cuando vas al despacho de algún gestor o asesor
fiscal. Estos siempre saben sacar más dinero a tu favor, de forma legal, puesto
que Hacienda nunca te la rechaza. Hacienda siempre deja de incluir el pago de
tu hipoteca, las cantidades abonadas a sindicatos o cualquier otra organización
sin ánimo de lucro, como ONGs, etc. Hacienda, casualmente, siempre comete el
mismo error cuando incluye tu patrimonio, por ejemplo en el caso de que tengas
algunas propiedades a partes iguales con tus hermanos, y supongamos te
corresponde un 33 %, siempre te cargan en el borrador el 100 %, por lo tanto
los rendimientos por dichas propiedades son más elevados, lo que te resta
dinero a deducir.
Hay otro tema
que nos afecta a muchos, que son los hijos mayores de 25 años, sin trabajo y en
casa, qué pasa con estos chavales, que no comen, que no gastan, como ya los
sacan de nuestras declaraciones, ya no se consideran carga familiar, dicho en
el mejor de los sentidos. Ya no hay bonificaciones, yo no entiendo esto, o sea
que el sistema es incapaz de crear los puestos de trabajos necesarios para la
población y estos chavales comen, se visten y gastan lo que los padres
desembolsamos, pero a la hora de hacer la declaración son invisibles para
Hacienda. Esta debiera saber si se coordinara con el resto de la Administración
en qué situación están las familias y deberían proponer una declaración justa
en cada caso, porque hoy que no se hacen las cosas a mano sino que con buenos
softwares e introduciendo los parámetros correctos, puedes obtener los
resultados que pretendas, sin problema y sin complejidad, el programa hará el
resto.
Lo que hay es
que querer hacer las cosas bien y querer trabajar para los ciudadanos, para su
bienestar y en ello va implícito el molestarles lo menos posible, al mismo
tiempo, ser lo más eficaz y eficiente, que no son lo mismo aunque si son
parecidos. Eficaz es estar dotado para hacer aquello que se espera que haga, y
ser eficiente es hacerlo en el menor tiempo y con el menor gasto posible. Pues
esto es lo que esperamos los ciudadanos de las instituciones, pero casualmente
las instituciones solo es un nombre, un espacio o un edificio, las eficaces y
las eficientes han de ser las personas que trabajan allí, demos la
responsabilidad a quienes la deben tener, no es el Gobierno, no es el mundo, no
son las instituciones, etc., son las personas las que han de ser responsables
de lo que hacen y de cómo lo hacen.
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