El país está en manos de
bandidos, así que todo lo que diga o hagan estará supeditado a la búsqueda de
su impunidad o de que nunca se sepa lo que hacen. Cualquier dato que provenga
de ellos será poco fiable, incluso, estará manipulado, por ejemplo: si cada uno
de nosotros tenemos a nuestro alrededor una serie de personas que desde hace
años no consiguen trabajo, ¿quiénes son esas personas, por miles, que dice el
Gobierno que han salido de la cifra total de desempleados?, ¿no será que cada
vez que hacen un contrato el Gobierno lo cuenta como un parado menos, pero
cuando a la semana vuelve a estar en el paro no lo vuelve a sumar a los
desempleados?, ¿no será que diga la cifra que diga, “está bien”, porque nadie tiene
medios para comprobarla? Como verán, las dudas que tengo en el actual Gobierno,
son totales. Es un partido que ha demostrado tener en sus filas tantos golfos,
que cuesta creer una sola palabra que nos digan.
La vida española sin algunos de
los partidos que a lo largo de la historia nos han traicionado, tendría que ser
mejor. Los gobiernos atienden más los acuerdos externos y los negocios
particulares que suelen hacer con empresarios y banqueros, que los problemas
reales que sufre la ciudadanía. Pocas soluciones ponen encima de la mesa,
suelen hacer maquillaje, son expertos en estética, robos, engaños, manipulación
de la gente, sanciones a la ciudadanía y coartar la libertad del pueblo. Son
expertos en hacernos perder nuestros derechos porque no les importamos más que
para abonar nuestros impuestos y votarles cuando lo requieran… el resto del año
nos pueden ir dando muchas puñetas. Los gobernantes no están a nuestro lado
sino enfrente, deberían ser nuestros aliados y nuestros empleados, pero ¡no!,
son el enemigo y nuestros opresores; ellos dictan y nosotros estamos obligados
a obedecer por las buenas o por las malas… la justicia y los cuerpos de
seguridad están a sus órdenes.
Me quiebro la cabeza pensando en
qué podemos hacer para quitarnos de encima a todos estos desalmados y, al
final, no hay otra que una muy fea, pero lamentablemente pasa por ahí, debido
al grado de poder que su sistema le otorga a ellos. Intento imaginar muchas
formas, pero al final todas se encuentran con que ellos están por encima y
pueden modificar leyes a su favor, dirigir a jueces y fiscales y seguir jugando
sucio contra la población. El poder de la población unida ha de ser tan
contundente que podamos vencerles, pasar por encima de ellos, desposeerles de
su poder y mandarles a casa. A ver cuándo se da cuenta la población que el
juego de ellos es la división y la defensa de diferentes signos, colores,
banderas, etc. Ahora Tabarnia, ya están confeccionando no sé si son diez mil
banderas, se está generando un sentimiento nuevo de separación con tal de hacer
ruido y volver a fraccionar el endémico sentimiento de unidad del pueblo
español. Esto facilita la conducción del “ganado”, pues nunca nos vamos a
plantar, nunca vamos a tener peso para disputar el poder a nadie, siempre harán
con nosotros lo que quieran.
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