El año se va terminando paso a paso, lentamente, no voy a mirar las noticias en busca de inspiración para escribir, mi mente reclama paz en el mundo, salud y protección para los más indefensos, igualdad y trabajo para todos, pero en especial para los que menos tienen y estén más necesitados. Es inimaginable terminar el año como empezó, o sea, con el fusil en la mano, sin poder sentarse a la mesa con sus respectivas familias, sin poder abrazar a los suyos, sin poder besar a amigos, familiares y a sus respectivos cónyuges. El aberrante conflicto bélico, allá donde se dé, no tiene razón de seguir existiendo, la vida de las personas ha de anteponerse a toda causa que se quiera justificar. Es lo más preciado que tenemos todos los seres vivos, y nada ni nadie debiera poder disponer si vamos a vivir o morir, decidir solo nos pertenece a cada uno de nosotros, a cada uno de los soldados, y a nadie más por muchas estrellas que lleven en los hombros, en las solapas o en las bocamangas. Nadie debe vivir ningún día de su vida con pánico o terror, con miedo a lo que le pueda hacer otro u otros. El invento y negocio que supone las guerras son una atrocidad, una animalada, un sinsentido, un acto vil de crueldad y perversidad, en definitiva todas esas locuras desembocan en genocidios, perecen miles o millones de seres inocentes, las víctimas siempre son los que no han decidido invadir a ningún otro país sino los que fueron mandados a matar y a morir. Los que dictan están bien refugiados y resguardados de los efectos de las guerras en sus despachos dentro de sus bunkers, ellos no sufren la tragedia de vivir cada día como si pudiera ser el último, como si pudieran caer bajo una fuerte explosión cuando se ven venir los aviones enemigos, o cuando disparan los de enfrente. No hay bandos, nadie es enemigo de otra persona salvo por programación y contagio mental, por lavado cerebral, todos y todas son personas, genero humano, parte de un todo llamado humanidad, por mucho que se esfuercen por organizarlos como rivales o enemigos.
Hoy no miro las noticias porque ninguna tiene el peso de la miseria a la que unos hombres someten a otros hombres. El sistema capitalista solo piensa en vender y generar beneficios, principalmente para un grupo selecto y pequeño de individuos que solo ven billetes desde que se levantan hasta que se acuestan, solo estudian gráficas económicas, y hacen inversiones aunque de ellas resulten desahucios, abandono, pobreza, hambre o muerte. El capitalismo como ha sido implantado es despiadado y ha sido mal entendido, solo en favor de un grupo reducido y en contra de la gran mayoría que le sirve a aquellos como engranajes de sus cadenas de producción y generación de ganancias. Nos permiten vivir porque le somos necesarios para doblar la espalda e ir dejando nuestra salud haciendo esfuerzos y preocupándonos en demasía para realizar funciones que nos ordenan hacer, muchas de ellas sin ton ni son, pero los que pagan mandan y nosotros a obedecer, es como nos quiere el sistema mafioso y corrupto que han organizado a su favor. La prensa solo cita de paso algunas acciones que cometen contra las poblaciones del mundo, pero no entran a fondo, no les critican, pues casi todas esas organizaciones poderosas, mafiosas y corruptas, son dueñas de los medios de comunicación, y se difunde lo que crean conveniente y les favorezca. Callan todo lo que pudiera hacer reaccionar a la población adormecida y distraída con la telebasura, las competiciones deportivas, la celebración de eventos que nada o poco aportan a la gente, pero que consiguen el propósito de distraer la atención: Premios Grammy, oscars, alfombra roja, la princesa, la familia real, la vida del famoseo popular, televisión, festividades y celebraciones varias, etc.
Abogo a la inteligencia humana para que podamos descubrir el grano entre tanta paja como nos ponen por delante. Somos seres inteligentes, algunos concluyeron diciendo, a pesar de las dudas que albergo, que somos los seres más inteligentes de la "creación"... ¡demostrémoslo! MUCHAS FELICIDADES PARA TODOS.
Seguiremos...
No hay comentarios:
Publicar un comentario