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Acabo de escuchar por la radio el testimonio de algunas personas que no pudiendo hacer frente al gasto en electricidad han optado por no hacer uso de calentadores, aires acondicionados, etc., al tiempo que deciden pasar el invierno con sudaderas, liadas en mantas, acostándose temprano, etc. Lo que sucede en España es de vergüenza, nuevamente una muestra de que los salarios son ridículos con respecto al coste de la vida, cómo han subido los precios de todo con miles de excusas: la guerra de Ucrania, los temporales, la sequía, etc., todos los argumentos que se han querido inventar con tal de encarecer los servicios, los productos y rebañar más y más los cortos sueldos de la gente más humilde.
Hace años la empresa generadora y suministradora de electricidad era una empresa pública, con beneficios evidentemente y los políticos decidieron privatizarla por su interés. Ahora todos sufrimos la avaricia de todas las empresas que han crecido alrededor de este servicio tan necesario para calentar, cocinar, refrescar, etc. De su avaricia proviene el sufrimiento de muchas personas mayores, y familias en general, que pasan frío para poder pagar hipotecas, alquileres, comer y abonar el resto de facturas habituales para poder seguir el ritmo de vida: desplazarse, vestir y calzar, además.
El Estado por su lado se procura lo suyo y aumenta el IVA super reducido o especial que se adoptó para paliar la crisis a la que contribuyen con la permisividad de que todos libremente pongan los precios abusivos que quieran aprovechando que el Pisuerga pasa por Valladolid. Vale cualquier excusa y no se interviene nada porque va en contra del liberalismo, del libre mercado y de los beneficios de ciertos grupos de inversión abusones, o de algunos grandes empresarios, pero no porque sean brillantes, sino porque están al frente de grandes compañías, o grupos de empresas, casi siempre favorecidas por amistad de tales o cuales altos cargos políticos que corrompiéndose, los unos y los otros, trocean contratos, o simulan situaciones de emergencia para conceder dichos contratos a dedo a quienes quieren.
Lo dicho: es una vergüenza que lo mal gestionado que se encuentra el país por este y anteriores gobiernos, nos hayan llevado a esta situación salvaje de comercio libre y abusivo de usureros vaciando los bolsillos de los ciudadanos. Hacen miles de artimañas con tal de abusar de los precios, retienen mercancía hasta lograr hacer creer que la producción es reducida y por eso se encarece el producto. Se escudan en que sube el combustible y ya todo, aunque venga desde la siguiente esquina, hay que elevarle el precio, pero nadie investiga cuánto cuesta fabricar u obtener tal o cual producto, cuál sería el beneficio lógico, y nadie se atreve a legislar para poner un tope a los precios, de modo que la población no sea abusada o violada económicamente hablando. ¿Cuándo dejará de ser una sociedad para inversores, y sea una sociedad para el bienestar de la gente? ¿Cuándo van a gestionar debidamente, aunque tengan que subir los impuestos para depender menos del dinero de la UE y nos endeudemos menos? ¿Cuándo podrán trabajar todas las personas que estén en edad de hacerlo y quieran trabajar? ¿Cuándo pondrán fin a las ridículas ayudas porque tengamos el pleno empleo?, y por último, ¿Cuándo los sueldos y pensiones nos darán margen suficiente para vivir dignamente?
Seguiremos...
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