Los medios de
comunicación hablan desde hace días del TTIP, del tratado de libre comercio, y
es que Obama quiere dejarlo firmado antes de que concluya su mandato, pero yo
digo que el TTIP “¡para los americanos! Por lo que trasciende, dentro del
oscurantismo en el que marchan las posibles negociaciones, EEUU está sometiendo
a altas presiones a la UE para que acepten productos prohibidos y de dudosas
repercusiones, a la larga, en la salud de las personas. EEUU está intentando
obligar a los Estados de la UE a que sus empresas, que utilizan métodos
prohibidos para nosotros, triunfen y vendan sus productos en las estanterías de
los centros comerciales europeos.
Pero no
conforme con ello, EEUU también trata de que aceptemos un comité de arbitraje
ajeno a los Estados de Europa, que tengan capacidad para querellarse contra la
soberanía nacional de los países que incumplan el acuerdo. Ellos quieren
imponer este Tratado a toda costa, aunque perjudique la salud de la gente y
violen las soberanías de los pueblos; de lo que se trata es de hacer negocio a
cualquier precio. ¡Pero, bueno!, ¿este que abuso de poder es?, ¿EEUU se cree
que está rodando un film mafioso?
Como no
tenemos bastante con la estafa de crisis que se inicio, igualmente, en los
EEUU, y las repercusiones que seguimos sufriendo; vienen ahora con la segunda
parte de la película de gánsteres: “El TTIP”. Firmar el acuerdo es traicionar a
los ciudadanos y ciudadanas, es destruir la democracia de los pueblos y ceder
la soberanía de los Estados. EEUU tiene que aceptar de una vez por todas que no
es el amo del mundo, y se debe quitar de la cabeza que la vida real sea “La
guerra de las galaxias”, ni hay marcianos que vienen a invadirnos y a dominar
el mundo. Así que se dejen de jugar a los marcianos invasores, que ellos si que
lo parecen.
Como español y
como europeo me opongo completamente que en mi nombre se firme ningún tratado
invasivo y represor como el que están poniendo sobre la mesa. Cada país tiene
sus leyes y sus normas, sus criterios de consumo y seguridad alimentaria y
sanitaria, para que venga EEUU y se los quiera saltar como mejor le venga en
ganas. Y esto sin haber entrado en la sobreprotección que hace el Tratado de
los lobbies y demás grupos buitres inversores, incluso ellos estarían por
encima de las leyes de los países, pues cualquier conflicto o vulneración del
contenido del TTIP, por parte de cualquier país, se tendría que someter al
comité de arbitraje y a lo que este dictara, vulnerando el Estado de derecho y
sus leyes, por tanto, la soberanía y la democracia de ese país. ¡Esto es una
barbaridad!
¿Por qué las
negociaciones se llevan en secreto? Me parece que en estos tiempos en los que
todos proclamamos transparencia, y reclamamos más claridad en todo; no puede
venir EEUU a corromper a la UE con su TTIP. Ya existe globalización en el mundo
para hacer cuantas transacciones comerciales se quieran, pero eso sí, cumpliendo
con las leyes internas de cada país. Pero claro, EEUU quiere saltarse esas
normas de seguridad de cada país para vender productos prohibidos y poco
seguros para la salud de la ciudadanía europea. Lo mejor que se me ocurre a
estas alturas es retomar aquella pintada que sobre los setenta podíamos ver en
las paredes: “Gringos go home”
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