Si digo que el cambio primero se
ha de producir en cada uno de nosotros, puede parecer un tópico, pero es
necesario e imprescindible. Igualmente, es posible que se produzca por toma de
consciencia individual más un trabajo realizado exprofeso, o bien, por
influencia externa de unas condiciones energéticas excepcionales que se den en
el Planeta.
Al final, el objetivo es que la
humanidad despierte, se haga sabia, tenga el conocimiento de sí mismo, se
sienta un todo, y desde el amor decida el camino a seguir. Con una humanidad
así, de seres conscientes, no hacen falta tantas reglas, quizá ninguna sea
necesaria para convivir en paz, pues siendo amor impide que haya conflicto. No
haría falta el dinero, podríamos prescindir de él, podríamos tener una sociedad
sin intereses monetarios, sin competencia, sin rivalidad sino con colaboración
y cooperación. Hay tecnología suficiente y recursos abundantes como para que
podamos compartirlos y diseñar una sociedad de seres inteligentes, en la que
las máquinas trabajen por nosotros para que tengamos los productos que
necesitemos. Fíjense que digo: que necesitemos.
Todo se simplifica enormemente,
la burocracia no tiene objeto, no hay declaraciones que hacer, no hay impuestos
que pagar… no hay dinero, ¿recuerdas? Deja de existir la corrupción porque no
hay adjudicaciones con contraprestaciones ni comisiones, no hay que financiar
ilegalmente nada, y en esta nueva situación existencial la gente no se enfrenta
sino que colabora, por tanto dejan de existir las defensas de tales o cuales
colores o banderas… la gente comprende. Todo lo que leen a algunos les parecerá
un cuento de hadas o el mundo feliz de Aldous Huxley, puede ser que esboce una
idealización no muy diferente a la que un día pudo ser la que esbozó el que
idealizó la sociedad tal como está implantada hoy en día. Las cosas se piensan
porque son posibles, existen en algún plano más o menos sutil, y en cualquier momento
de la historia puede materializarse.
En el fondo, el contenido de este
escrito tiene unas ideas esenciales y concretas: el cambio de los seres humanos
debido a la influencia de una energía o una frecuencia del Planeta, una
sociedad que no necesita dinero para existir, y donde las máquinas hacen el
trabajo por nosotros. ¿He dicho algo?... es poca cosa, para el cambio tan
enorme que supondrá cuando llegue. Yo le espero, no sé si tú también has
pensado en ello, si cabe en tu cabeza, si lo ves posible. Tengo la intuición de
que esto sucederá en algún momento, hay muchos que hablan del cambio de frecuencia
de la Tierra y de los efectos que tendrán en los seres vivos. Podemos dar mucho
más de lo que damos ahora, tenemos mayores capacidades adormecidas y, también,
tenemos bloqueada la libre circulación de la energía esencial que somos.
Tenemos una programación que nos ha hecho adoptar un papel egoísta, tener unas
creencias de nosotros que nos limitan y tomar a los otros como rivales. Una vez
le oí a un hombre sabio decir: “El hombre moderno está en la calle correcta,
pero va en la dirección equivocada”. Desde la mente actual diríamos que hay
mucho por hacer. Desde la inteligencia y el cambio que se espera, las cosas
serán diferentes casi sin hacer nada, apenas se alineen con la energía de vida
que somos.
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