Imagen: www.drakul.es
Se nos viene encima una buena, el dinero que nos va a entregar la UE y el paseíllo que le hicieron a Sánchez, como si hubiera llegado victorioso de una campaña militar contra los galos, no son gratis, sino más bien una ruina a sumar al estado de quiebra en el que se encuentra el país. Cierran empresas, la gente queda en la calle, se inventan los ERTES, el dinero que no le llega a casi nadie, faltan sanitarios para atender la situación delicada por la que pasamos, faltan educadores para conseguir llegar a lo que tanto han publicitado: una vuelta segura al cole. La deuda pública aumenta, los intereses de la misma no nos dejan respirar, y ya se vislumbra un horizonte para el año que viene de lo más pesimista: hablan de reducir las pensiones, vuelven a hablar que nos llevamos cobrando más tiempo pensiones que cotizando en nuestra vida activa, quieren volver a prolongar seriamente la edad de jubilación de los trabajadores, claro está, no de los políticos, ellos tienen su sistema blindado de privilegios que es intocable, para eso son ellos los que hacen las leyes, ¿se van a fastidiar? ¡Qué inocentes somos! Ya hablan de reducir el salario de los funcionarios, vuelven a oírse voces en pro de la productividad y la competitividad, como ellos la ven: trabajar más por un menor sueldo (empeorar las condiciones de trabajo) Otros quieren subir los impuestos, pero como los de arriba, los que mandan, impiden que la subida repercuta directamente a los que más tienen y más ricos son, buscan la forma de subir un impuesto, tal vez el IVA, que nos afecte a todos por igual, o sea, que la clase trabajadora siga sin poder levantar cabeza. Los oídos nos lo están preparando para lo que está por llegar, porque aunque la UE repita y haga hincapié en que lo que corresponde no es empeorar la vida de la gente, sino adelgazar la estructura política con todas sus duplicidades, enchufes, puestos inventados para dar cabida a la tropa de gorrones, militantes empedernidos y extendedores de alfombras de unos y otros partidos, ellos prefieren seguir oprimiendo al pueblo, a la clase trabajadora.
Si redujeran el empleo de la ETT de la clase política en España a la mitad y, supongamos, todos los que quedaran se redujeran el salario, también, a la mitad, ya ganaríamos en liquidez un buen pellizco. Si se dejara de subvencionar a la Casa Real al completo y a la Iglesia. Si se exigiera firmemente la devolución del dinero dado a los bancos, pero no este último atraco a la ciudadanía española, sino el importe de todos los atracos como ese, que se han producido desde que Franco se hizo con el poder. Si se auditara seriamente todas las operaciones, adjudicaciones, privatizaciones, etc., que se hicieron de un modo abultado para que sobrara para la financiación de tal o cual partido, o para la financiación ilegal de sus campañas electorales o repartos de sobres de dinero. Si se exigiera la total devolución del dinero que mediante la corrupción de los gobiernos y de los políticos que hemos tenido en todos los tiempos en España, ha desaparecido. Si se eliminaran todas esas formas de montajes que dan lugar a la ingeniería financiera, por la que muchas multinacionales o personas con grandes capitales eluden el pago correspondiente y en igualdad de condiciones que el resto de la población. Si todo eso sucediera, es muy posible que pudiéramos pagar la deuda y librarnos de los tentáculos de la UE y de sus hombres de negro. Es probable que no tuviéramos que sufrir el escenario para el cual nos están preparando, pero con políticos que pasan con total desfachatez de lo que sufra o padezca la población, no hay solución. Ellos no van a reducirse su salario. Ellos no van a dejar a la mitad de sus palmeros de partidos en la calle. Ellos no se van a enfrentar a la banca para exigir lo que es nuestro. Ellos no van a enfrentarse a grandes empresarios dejándoles con el culo al aire, porque en esa auditoría que yo mencionaba, se quedarían los culos al aire, también, de todos los que gobernaban y acordaban pagar el doble o el triple del verdadero costo de las obras, con tal de agarrar el cacho pretendido.
Sin extenderme más, solo concluir con que nos han gobernado y nos gobiernan traidores, gente desalmada y desconsiderada. Gente que llegaron arriba para servirse de los de abajo. Gente que siempre se retira millonaria, y trabajando sabemos que nunca se alcanza la riqueza, sino vivir más o menos decentemente, pero es que la clase política es indecente, ¿recuerdan cuando Sánchez se lo restregaba a la cara a M. Rajoy, el de los papales de Bárcena? Al mismo tiempo, para demostrar la falta de palabra y la indecencia de Sánchez ¿recuerdan la de veces que le dijo a M. Rajoy, el de los papeles de Bárcena, lo de que en cuanto llegara al poder publicaría la lista de los 700 defraudadores? Si Sánchez tuviera moral alguna, hubiera cumplido con su palabra, la hubiera dado a conocer al resto de los españoles, que tenemos derecho a saber quiénes nos roban, y hubiera exigido que hubieran ingresado en las arcas públicas lo que estafaron. ¿Por qué no lo hace?, porque debe haber nombres de personalidades de los que no cabe esperar que nos hayan estado apuñalando por la espalda, quizás, haya nombres de compañeros de partido, etc. Esa gente la podemos considerar timadora profesional, mienten más que hablan, solo sirven para el insulto y para tratar de colocar a cuantos más de los suyos, y eso es lo que han hecho todos los que han ido agarrado poder, por eso es fundamental adelgazar la grasa, la mugre que entre todos los que han ocupados cargos relevantes en este país, nos han ido endosando. La Administración pública, central, local, regional, autonómica, están plagadas de gente inservible, experta en no trabajar, que su único mérito es haber sido enchufada. La política está llena de parásitos y traidores. Todas las Instituciones están muy necesitadas de una revisión a fondo para separar el grano de la paja.
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