Imagen: www.tagoror.es
El suelo tiene su riqueza propia, inherente, natural, como queramos definirla, y es la que es, la que tiene, la que nos ha tocado… ¿eso qué tiene que ver con Patria y todo ese sentido profundo que muchos han dado al suelo? La gente que vive en ese suelo importa, tiene problemas, sufre necesidades porque esa gente que se erige en gobernante cada cuatro años es incapaz de hacer de este país un lugar autosuficiente, industrializado al nivel conveniente para asegurar la cantidad de puestos de trabajos que demanda su población. Ese sí que es un verdadero problema por el que debían arder las redes sociales. El progreso negado por esos gobernantes de tres al cuarto, vividores, traidores, embusteros y mamarrachos, sí que es una losa que lastra la vida de millones de personas sin ingresos, sin recursos o, en muchas ocasiones escasos. Todos acusan a los demás de no hacer aquello que cuando ellos gobernaban tampoco hicieron, esa es la inutilidad de una guerra sin sentido en el seno de la política. De la política hay que olvidarse hasta que el ser humano esté preparado para trabajar por los demás, no solo para sí mismo. Hay que darle la espalda hasta que el ser humano no adquiera un nivel de conciencia suficiente para que los demás le importen. Cuando llegue ese momento se acabarán los problemas, se terminarán las tragedias, desaparecerán las guerras y la pobreza, el hambre será solo un mal recuerdo o un mal sueño.
Este enfoque que tanto cuesta ver o comprender a muchos, les hace apegarse a todo tipo de simbología, incluido el concepto etéreo de Patria, arremetiendo contra todos los que confiesen no sentir lo mismo. Nadie está en posesión de la verdad absoluta, es por ello que sin mediar la tolerancia, el dialogo, la comprensión y el deseo de colaborar en la consecución de un objetivo que se establezca como prioritario para la gran mayoría, sobretodo, para los que menos tengan y más necesiten, estaremos acabados. Agotaremos cualquier sistema que nos pongan por delante, porque el modelo de los que hasta ahora han gobernado es un sistema parasitario, nos convertimos en una gran parasitosis para “el animal”, y ya se sabe, cuando la infestación es tan grande la vida sucumbe.
Debemos saber minimizar el consumo de recursos, solo emplear los que sean convenientes para satisfacer una demanda controlada o lógica. Hay que crecer industrialmente, con orden, para dar trabajo a toda la población en disposición de generar riqueza para su país y para conseguir unos ingresos que le permita vivir dignamente. Los trabajos han de estar bien remunerados en cuanto que compensen adecuadamente los esfuerzos que se hagan a diario en los puestos de trabajo. Sería justo que todos ganásemos un salario semejante, puesto que todos nos enfrentamos a los mismos precios en el mercado. Debemos alcanzar la excelencia humana para considerarnos humano y tratarnos como tal, dispensarnos respeto, colaborar entre nosotros para lograr vivir cada día mejor sin perjudicar a nadie. No como sucede ahora que unos viven muy por encima de cómo pueden hacerlo otros.
Por favor, los de las redes sociales, y yo entro con cierta frecuencia, bajemos los humos, vamos a dejar de perdonarles la vida, busquemos punto en común con el otro, dialoguemos, negociemos, hagamos un esfuerzo por entender su mensaje. Por supuesto, desprogramémonos de todo aquello que socialmente a los diferentes regímenes y corrientes ideológicas gobernantes ha interesado. Limpiémonos de toda esa mugre que han ido vertiendo sobre el ser humano que somos cada uno de nosotros. El otro es igual que nosotros, la euforia no tiene cabida, el odio tampoco. La agresividad hay que dejarla a un lado, debemos salir de la espiral de mierda en la que nos hayamos sumido. No sigamos siendo presos de una rigidez pasional y mental, dejemos de imitar a los que se erigieron como líderes de un movimiento fracasado, que como vemos soluciona bien poco cuando tiene la ocasión de hacerlo, ¿sabes por qué lo hacen?, pues porque dejan de enfocarse en la ciudadanía para centrarse en los tejemanejes que le ofrece su posición exclusiva. Ustedes habrán visto que se niegan a investigar a corruptos, que la justicia mira para otro lado, permitiendo que roben lo que es de todos, el dinero que entre todos aportamos para unos fines sociales y comunes. Nos traicionan, nos engañan, se niegan a mejorar nuestros salarios al tiempo que elevan los suyos de una forma amoral y desconsiderada con el resto de trabajadores. ¿Por qué esa lucha encarnizada en las redes sociales para defender a esos cretinos?, ¿no se dan cuenta?, sean del palo que sean, no se lo merecen. Lo único que saben hacer es vivir subvencionados y pedir dinero a la UE, o sea, endeudar más y más a los españoles, ese es el sentido de Patria y Constitución que tiene esa gentuza.
No hay comentarios:
Publicar un comentario