Este si que va por mis compañeros
del curso de formador ocupacional, por todos y cada uno de ellos, incluida la
excepcional docente que lo ha impartido, que por su puesto ha sido una
compañera más.
Si recorremos el aula de
informática, haciendo un recorrido por las correspondientes mesas, comenzando
por la derecha y terminando en la mesa de la docente; encontramos a la niña de
los rizos, Maria José, que cuenta todo con todo lujo de detalles, es la niña
grande con vocación de entretener y hacer actividades al aire libre con los más
pequeños. Ha simultaneado este curso con la preparación de unas oposiciones,
por lo que aprovecho para desearle mucha suerte.
Al lado de Maria José, se sienta
Maria, la de la voz dulce, la que tiene capacidad de historiar e involucrarte
en cualquier exposición relatada. Tiene un dominio elevado para modular y
flexionar con la voz, alcanzado los tonos más amables y suaves que puedas
imaginar. Le gusta la música y las bibliotecas, y le deseo mucha suerte en
ambas dedicaciones.
Pasamos a la segunda fila de
mesas, y vemos a la gran Elena, porque para eso se apellida: Grande. Esta mujer
es un torbellino de creación y energía, es autentica, es contagiante, y te
puede sorprender con cualquier iniciativa personal o profesional. Seguro que
donde llegue va a triunfar, y si no se quedan contigo, no saben lo que se
pierden.
Junto a Elena, se sienta la gran
Lola, maravillosa Lola, simpática persona, cariñosa, muy madre. Es mi Lola
Lacoste, una mujer con clase, una pedagoga profesional que lleva su profesión a
medias con las vivencias de sus niños. Debo decir que me ha sorprendido el gran
corazón que tiene y su gran sentido del humor. Tiene marcha y espero que sea
así durante muchos años.
En la tercera fila vemos a la
izquierda, siempre mirando desde la pizarra, a SuperToñi, pedazo de mujer,
pedazo de compañera y gran profesional del mundo de la orientación profesional.
La voy a recordar mucho, pues no en vano es una de las compañeras con quien más
he hablado, nos sentábamos muy cerca. ¡Era tan linda!, se ruborizaba en
ocasiones, es algo tímida pero deja huella. Igualmente Toñi, espero que tu vida
se parezca al más hermoso paseo de los que te hayas podido dar por la sierra.
Junto a Toñi, se sienta Marta, yo
le llamo Martita cariñosamente, cariñosa, su lenguaje no verbal es un tanto
nervioso, tiene constancia como lo demuestra el haber aprovechado su tiempo
desempleada en hacer su carrera universitaria de psico-pedagogía, y eso habla
mucho de ti. Vas camino de ser una gran profesional, porque difícilmente puedo
olvidar tus exposiciones, tan bien estructuradas y tan llenas de un contenido,
del que mostrabas un gran dominio.
Al lado de Marta se sienta Elena
“chica”, nombrada así porque se acordó para diferenciarte de nuestra compañera
Elena Grande. Contigo he tenido todo el curso una pequeña complicidad, como
sabes. Siempre serás mi niña traviesa, pero una gran profesional de la docencia
y una gran bióloga. Sigue en mi mente los ecosistemas, tus exposiciones tan
bien impartidas hacia el resto de tus compañeros, el dominio de la clase es
absolutamente tuyo, por lo bien estructurados y trabajados de los contenidos,
así como el control de los nervios, la voz y de la pizarra. ¡El mundo de la
docencia es para ti mi niña traviesa!
Detrás de estas tres compañeras,
tenemos a Vero, un autentico terremoto de energía y naturalidad, es ella misma.
En ningún momento trata de imitar nada ni a nadie, se basta ella solita, que
con su genio y figura, su gracia y su torrente de voz, se hace con los mandos
de la clase. Puede parecer pequeñita, pero yo os digo que no, que es grande,
muy grande, y que va a ser lo que ella quiera.
Vero se sienta junto a Azahara,
la bella joven silenciosa, y digo esto porque es muy prudente en sus
intervenciones, solo las hace para indicar lo que viene a decir, ni más ni
menos, o sea precisa como Ingeniero que es. Y qué evolución ha mostrado en sus
puestas en escena, desde unos comienzos, como nos ocurría a todos, que
luchábamos con los nervios, hasta llegar a ser amigos de ellos. Azahara para mí
ha sido un ejemplo de persona, de alumno y de profesional. Eres muy joven, y te
va a ir muy bien seguro.
En la fila de detrás se
encontraba un solitario Rafa, el hombre que me asustó cuando leí su curriculum
pues no sabía como había sacado tiempo para realizar tantos cursos, con lo
joven que es. Un hombre aparentemente muy tranquilo, muy trabajador, con
amplios conocimientos informáticos, creativo, con buen manejo del humor irónico
que conjuga excelentemente con humor intelectual. Es el hombre que se atreve
hasta con el chino, yo creo que no quiere que le cuenten cuentos. Espera un
hijo y le deseo mucha suerte en ese
nacimiento que está cercano, así como mucho éxito profesional.
Comenzando por detrás por las
mesas de la izquierda, se encuentra Javier el informático, Ingeniero técnico,
el “resuelveproblemas” de la clase. Con él todos hemos aprendido muchas cosas
del mundo de los ordenadores, hemos podido compartir un tiempo con un tío
gracioso, de chiste fácil, grande porque lo es de estatura y como persona.
Siempre voy a recordar los paseos que dábamos en la media hora del desayuno, de
la degustación de caramelos Hall y de los ratitos al sol, “fotosíntesis”, como
decían nuestras compañeras.
Por delante de Javier estaban
Manolo, Manué que es como le gusta que le llamen, y Pedro, inseparable pareja
de hecho, formidables compañeros. Manué una persona entrañable, no es fácil
olvidarle porque ha sido afable, amigable y con un sentido común aplastante.
Amigo de sus amigos, muy familiar como el decía, amante del cafelito, la pausa
para el cigarrito y la cervecita en el Salvador. Un profesional de la mecánica,
dispuesto a trabajar en cualquier tema, un buscador y un luchador. Y así Manué
te va a llegar el trabajo, seguro. Hasta pronto docente, echo de menos las
caminatas hasta el Prado, acompañadas de conversación.
A su lado, como dije, está Pedro,
un tío redondo, cariñoso, generoso, conocedor de un ciento de aplicaciones
informáticas, aficionado a la fotografía, te
hace el video, te lo monta, te trastea una fotografía, le hablas de un
programa y lo conoce, es un fenómeno. A mi me ha ayudado cientos de veces con
los caprichos del Word 2003 y 2007, y las historias que se arman cuando
trabajas en dos versiones diferentes. Rafa también me sacó de una buena en este
sentido. Sigo con Pedro, este es su momento, el momento de un tío marchoso,
aficionado a su cervecita, es de pose mirando al techo, pero divertido; es el
hombre del costal y el flamenco. Es el hombre de los números y las cuentas, así
que espero sume mucho con los conocimientos y la calidad profesional y personal
que atesora.
Por delante de ellos estaba yo,
que les he apreciado mucho, que les he querido y de los que he aprendido cuanto
la ocasión me ha permitido. Me ha parecido un curso y un grupo muy especiales,
donde se ha trascendido el mero aprendizaje para no solo hacer un provecho
adecuado del mismo, sino establecer vínculos de amistad e incluso poder
expresarnos desde lo profundo, compartiendo sentimientos y emociones. Ha sido
un curso, un aprendizaje y un compañerismo que ha trascendido mis expectativas.
Gracias a todos.
Siguiendo hacia delante se sienta
María de los Angeles, ella es la voluntad, una trabajadora nata, una persona
organizada, con unas cualidades formidables para llevar las cosas bien y con su
correspondiente orden. La considero una gran profesional muy preocupada por la
formación, le gustaría hacer todos los cursos que se les pusiera por delante. Tiene
una gran personalidad, tiene su carácter, pero al mismo tiempo es sensible. Eres
muy linda, te aprecio mucho, te he tenido muy cerca e inevitablemente he
mantenido más contacto contigo. Confía en ti, tu si que vales.
Y por último, la primera, la
jefa, la persona que ha tenido la habilidad de, en primer lugar seleccionar
magistralmente el alumnado, y en segundo lugar saber cohesionar formidablemente
al grupo. Ella es la gran Rocío, Rociito para mí, porque ha sido muy especial
para mí en momentos criticos del trabajo, pues las enseñanzas metodológicas a
veces trascendieron el plano físico, y surgieron momentos desestabilizantes, que
Rocío supo leer al instante, mostrando su respuesta más humana y hermosa,
aquella que dan los más grandes sin pedir nada a cambio. Sabes que no solo eres
una extraordinaria pedagoga, docente, y que tienes todo el arte del mundo, sino
que además eres muy especial.
Gracias a la vida que me ha
permitido conoceros, y gracias a cada uno de vosotros porque sois tan genuinos,
y tan buenas personas.
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