La solución, si es que hay alguna
a este sistema de corruptos y corruptores, no pasa por ningún partido en
concreto, por ninguna ideología, ni marxista, comunista, fascista, de derecha o
de izquierda; pasa por ser más humano, o sea, tener mayor conciencia. Si los
hombres y mujeres pasan de ser tan avariciosos y egoístas a ser más humildes,
sensatos, respetuosos y a tener buenos sentimientos hacia los demás; quizás
entonces veamos la luz que tanta falta nos hace a todos.
Cuando las personas pongan fin a
la explotación disimulada en forma de trabajo en diferido y al juego de
mantener un desempleo estructural que ayude a los empresarios a abaratar la
mano de obra, así como a fomentar e incrementar el fraude que muchos de ellos
cometen… entonces, podremos empezar a vivir mejor todos y nos sentiremos en
disposición de colaborar más para alcanzar un fin común, que como sociedad pasa
por vivir como la gran mayoría actual quiere: en paz, teniendo un salario
digno, sin miedo y con futuro.
Mientras que los que se han otorgado
el poder sigan comportándose como el muro del frontón que solo sirve para que
nuestras voces y peticiones reboten, no hay nada que hacer. Ellos irán hacia
donde a ellos les interesa, y sus intereses seguirán distanciándose de los del
pueblo. Esto sucede hoy y sucederá mañana si seguimos dispersos, fragmentados
en el engaño de “yo soy de izquierda o, yo soy de derecha”… ¡no!, yo soy un ser
humano, eso es lo que soy, y como tal quiero lo mejor para los seres humanos,
para todos, sin distinción de sexo, ideología, raza, etc., tal vez, esto es lo
que falta haber reflejado en la Constitución. La Constitución de haber tenido
solo un artículo, precisamente ese, y de haberse cumplido a rajatabla, no tendríamos
el circo de engaño y corrupción que hoy envuelve a todos los estamentos
públicos y a sus dirigentes. Con aquel artículo, cualquier decisión que se
hubiera tomado contemplaría que el bien de todos es una condición sinequanon y,
por supuesto, no hubiéramos llegado a donde estamos.
Miren que sencillo es, el ser
humano solo tiene que comportarse como tal, no tiene que hacer otra cosa. Ya sé
que muchos piensan y dicen que el ser humano es capaz de hacer lo mejor y lo
peor, pero se equivocan, eso lo hace el “animal” bípedo llamado hombre, pero
apenas hay una evolución interior y adquiere conciencia del todo, deja de ser
animal, al menos, lo es en mucha menor proporción y es mucho más humano, sus
valores cambian. Ese es el ser que busco, el homus erectus lo es cualquiera, el
sapiens es más difícil de encontrar. Lo tenemos tan cerca que da rabia ver cómo
se deteriora todo en manos de animales bípedos egoístas de corta visión y
corazón congelado. Ellos saben lo que están haciéndole a la población mundial:
dejarle morir de hambre, crear descalabros económicos para conseguir fines
ocultos y grandes beneficios endeudando a los pueblos, crear conflictos armados
para apoderarse de recursos de la zona sin importarles la cantidad de hombres,
mujeres y niños que perezcan en el intento, cargarse el medio ambiente con tal
de conseguir beneficios con procesos industriales nada respetuosos con el medio
y con la totalidad de los seres vivos, etc.
Estamos abocados al colapso, creo
que es la palabra que mejor define el fin que nos espera. Como le oí a alguien
recientemente, no sé si un cambio de última hora será suficiente para evitar
las consecuencias de nuestros actos de los dos últimos siglos.
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